Si hay algo notorio en el que cambio generacional que venimos experimentado, es que cada vez parece que los chicos vivieran de forma más acelerada, maduraran más rápido e incluso quemaran sus etapas de forma apresurada.
Sin embargo, parece que esta idea va más allá de un imaginario común. Pues hay estudios que demuestran que la edad de la pubertad ahora es mucho más temprana, especialmente para las niñas.
Esto significa que los cambios corporales relacionados directamente con la maduración sexual, especialmente el crecimiento de los senos, comienzan a manifestarse a edades prematuras.
De acuerdo con el doctor Frank Biro pediatra del Cincinnati Children’s Hospital, existen múltiples razones para que se presente, y explica que es un hecho que se viene adelantado entre uno y dos años desde principios del siglo XX.
Con este panorama, los investigadores siguieron el desarrollo de más de 1200 niñas en San Francisco, Nueva York y Cincinnatti. Las niñas se inscribieron en el estudio cuando tenían entre 6 y 8 años, y fueron examinadas periódicamente por siete años.
Como consecuencia, los estudios citados muestran una tendencia de adelanto de la pubertad en las niñas de aproximadamente tres meses por década. El inicio en el desarrollo de los senos ha experimentado un mayor cambio en comparación con la primera menstruación. En los niños, aunque se ha observado un patrón similar, es mucho menos representativo.
Las posibles causas
Los especialistas explican que son muchos los factores que afectan y pueden alteran el inicio de la pubertad. La genética es sin duda el factor diferencial, que explica entre el 50 y el 75% de la variación. Pero hay otros factores relacionados con el estilo de vida que también agravan esta tendencia.
Así las cosas, los investigadores creen que este cambio también podrían ser el resultado de la epidemia de obesidad. Se ha demostrado que el exceso de peso corporal afecta el momento del primer período de una niña. Pero los estudios sugieren que este aumento de peso no explica por completo hasta qué punto ha avanzado la pubertad en las niñas.
Otra idea es que nuestra mayor exposición a la contaminación y a los químicos que alteran las hormonas, como los ftalatos, podría estar causando los cambios prematuros, pero, nuevamente, los datos no explican completamente esta asociación.
Graves consecuencias
Finalmente, con estos resultados, hay unas consecuencias que realmente preocupan a los especialistas
“Las niñas con una maduración más temprana corren el riesgo de tener una autoestima más baja y tasas más altas de depresión”, escribió el Dr. Frank Biro, pediatra del Cincinnati Children’s Hospital.
“Es más probable que se dejen influenciar por compañeros mayores y compañeros más desviados, e inicien relaciones sexuales, abuso de sustancias y otros comportamientos que rompen las normas a edades más tempranas”, escribieron Biro y sus colegas.
Ellos explicaron además que el vínculo entre la depresión y la pubertad temprana era evidente, incluso después de controlar otras variables, como el estado socioeconómico, el peso o el estado civil de los padres.
Por otra parte, la investigación también ha demostrado un vínculo entre la pubertad temprana y un mayor riesgo de cáncer de mama, de ovario y de endometrio, enfermedades cardíacas, uso de drogas e incluso mortalidad por todas las causas, que es básicamente la posibilidad de que las mujeres mueran por cualquier motivo.
Con esto se concluye que hay mucho más trabajo por hacer en este tema antes de que comencemos a entender completamente lo que está pasando en los cuerpos de estas niñas, pero cuanto más aprendamos sobre las razones detrás de la pubertad temprana y los efectos que tiene, más posibilidades tendremos de prevenir y predecir algunos de sus riesgos a largo plazo.
Y a medida que continúa la tendencia hacia una maduración sexual más temprana, esto con total seguridad tendrá mucha más importancia.