Con la muerte de la reina Isabel después de siete décadas de reinado, una nueva era comenzó para la monarquía británica, así el hoy llamado Rey Carlos III ascendió al trono y con este hecho, nuevas reglas se empezaron a cumplir.
Sin embargo, estas nuevas reglas parece que van en todos los ámbitos del nuevo reinado, pues el nuevo monarca de Inglaterra siempre ha dado de qué hablar por sus obsesivas y extrañas rutinas, que con su coronación parecen haber llegado a un nuevo nivel.
Por eso en Q’ Pasa te contamos algunas de las excentricidades más absurdas que se han filtrado del Rey Carlos III.
La obsesiva rutina
El ex mayordomo del palacio real, Paul Burrel dijo en una entrevista para el documental ´Serving the Royals´, que el ahora Rey Carlos III exige a la servidumbre atender al pie de la letra su rutina diaria.
Citando sus propias palabras, Burrel dijo: “hay que planchar sus pijamas todas las mañanas, los cordones de sus zapatos se aplanan con una plancha, el tapón del baño tiene que estar en cierta posición y la temperatura del agua debe ser ajustadamente tibia, también hace que sus ayudantes de aposentos pongan una pulgada (2,54 cm) de pasta en su cepillo de dientes todas las mañanas.
A esto se le suman los rumores de que el monarca paga exclusivamente a dos personas de confianza para que lo vistan y lo dejen impecable para que pueda llevar a cabo sus labores como Rey. A diferencia de la fallecida reina Isabel II, a quien “se le debían dar en mano todos sus atuendos, ya que toda su ropa se guardaba en el piso de arriba”, según Burrell en el portal web ‘Yahoo’s Royal Box’.
Un desayuno muy particular
Por otra parte, otros ex trabajadores de la casa real hablan de forma detallada respecto a los caprichos del “príncipe mimado”, como solían llamarlo despectivamente sobre su desayuno: tiene pan casero, un bol de fruta fresca y zumos de frutas. Dondequiera que viaje, la caja de desayuno va con él. Tiene seis tipos diferentes de miel, unos mueslis especiales y frutos secos.
También insiste en que el queso y las galletas se calienten a cierta temperatura al final de las comidas y pide a su personal que tenga cerca una bandeja para calentar. Su desayuno debe incluir huevos cocidos que previamente han tenido que cocerse exactamente 7 minutos y dos ciruelas, aunque solo come una.
Transporta su dormitorio donde quiera que vaya
La extravagancia más notoria de Carlos III es que no sólo viaja con su caja de desayuno sino que, en algunas ocasiones, cuando se va a alargar su estancia, hace que le envíen su cama, algunos muebles e incluso un cuadro, y se lleva los suyos. WC y papel higiénico Kleenex Velvet.
Todo esto ha llevado a muchos a pensar que el rey Carlos padece de trastornos obsesivos compulsivos, aunque este hecho fue negado tajantemente por Buckingham y el entorno real.
La situación a la que se enfrenta Carlos III tras su coronación
Con todas estas situaciones hagan parte de la extraña y excéntrica rutina del rey Carlos III, hay algo que tampoco pasa desapercibido y es la situación política que enfrenta el Rey, quien parece mantener una escasa disposición a cumplir con las tareas formales de su cargo. La prueba está en pocos días de haber tomado su nuevo cargo, quiso tomarse una jornada total de descanso.
Pero, a pesar de sus ganas de tener tiempo libre, el nuevo monarca debe tomarse su trabajo en serio, pues en las calles del reino unido, en ciudades como Londres, Liverpool, Edimburgo, Cardiff y Belfast, se pueden ver carteles mostrando su rechazo al nuevo dueño del trono real. “No eres mi rey”, “Viva la Republica” o “Abolid la monarquía”, así que su trabajo será más intenso si quiere extender la posición de la monarquía.