Un sorprendente hallazgo en las aguas del océano Antártico ha dejado a los científicos boquiabiertos.
Un equipo de investigadores del prestigioso Instituto Scripps de Oceanografía y la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) ha revelado una nueva especie invertebrada marina que ha sido comparada con la apariencia de una enorme estrella de mar.
Nombrada como “estrella pluma fresa de la Antártida,” esta criatura marina habita en las profundidades, a una profundidad que varía entre los 60 y los 1.170 metros en el océano.
El increíble hallazgo ha sido documentado en un artículo publicado por la revista Invertebrate Systematics, en el que se detallan minuciosamente las características únicas de esta nueva especie.
El nombre científico de esta criatura marina es Promachocrinus fragarius, en alusión a su apariencia similar a una fresa.
Este extraño animal tiene nada menos que 20 brazos que exhiben diversas formas, algunos de ellos con una apariencia plumosa. Su tamaño puede alcanzar hasta ocho pulgadas.
El profesor de biología marina en la Universidad de California, Greg Rouse, ha expresado su entusiasmo por este descubrimiento, ya que con él se ha logrado identificar un total de ocho especies bajo el género Promachocrinus.
Este grupo de estrellas de plumas antárticas ha revelado criaturas asombrosas que añaden una capa de misterio y maravilla al mundo submarino.
Los científicos enfatizan la importancia de continuar con investigaciones a gran escala en el ecosistema de la Antártida y el Océano Austral para lograr comprender plenamente la diversidad biológica que estas profundidades ocultan.
La naturaleza del ecosistema de la región requiere un muestreo exhaustivo para desentrañar la complejidad de su biodiversidad.
Una nueva especie
La estrella pluma fresa de la Antártida es parte de las estrellas de plumas antárticas (Promachocrinus)
Aunque comparten similitudes con otras criaturas marinas invertebradas como las estrellas de mar y los pepinos de mar, las estrellas de plumas se destacan notoriamente por su tamaño considerable y su aspecto que ha sido descrito por los investigadores como “extraterrestre” cuando estas criaturas nadan.
Esta criatura, con su apariencia fuera de este mundo, ha capturado la imaginación de los científicos y entusiastas por igual.
Sus 20 brazos y su aspecto evocador de una fruta común hacen que sea un objeto de fascinación en el mundo de la biología marina.
Este descubrimiento no solo nos muestra la riqueza y diversidad del mundo submarino, sino también cuán poco sabemos sobre los misterios que aún aguardan en las profundidades oceánicas.
La conexión con una fruta tan familiar como la fresa agrega un toque emocionante a la historia.
Recordándonos que la belleza y complejidad de la vida en nuestro planeta siguen siendo un campo de exploración y descubrimiento continuo.
Imagen de portada tomada, nationalgeographic
