En la actualidad, las terapias alternativas se han vuelto bastante populares como un medio para mejorar nuestra salud y bienestar emocional.
Sin embargo, en muchas ocasiones, estas terapias están influenciadas por las redes sociales, lo que lleva a las personas a adoptarlas sin un conocimiento profundo sobre su fundamento y sin considerar si son adecuadas para sus necesidades específicas y su salud en general.
Por eso, cada vez se conocen más casos de trágicos desenlaces de personas que se someten a terapias alternativas sin una previa consulta y terminan terminan enfrentando graves consecuencias que a veces terminan en finales fatales.
Esta es la historia de Kellie Jean Poole, una mujer de Inglaterra que murió trágicamente luego de someterse a una terapia con agua fría en un río.
La mujer que murió después de hacer una terapia con agua fría en un rió
Kellie Jean Poole era una mujer de 39 años originaria de Derbyshire, Inglaterra y madre de tres hijos, quien en un día que buscaba relajarse y divertirse con sus amigos decidió someterse a una terapia con agua fría en el río Goyt, sin saber que acabaría con su vida.
La mujer pagó $243 dólares por vivir una experiencia supuestamente revitalizadora a través de una terapia con agua fría en el río Goyt, sin embargo una afección cardiaca entre el proceso terminó en un desenlace fatal.
Antes de entrar al agua realizaron ejercicios de respiración, sin embargo, Kellie empezó a quejarse por un dolor de cabeza, una vez entró al río sufrió una afección cardiaca que a pesar de brindarle RCP lo más pronto, no fue posible salvar su vida.
La autopsia reveló que la causa de su muerte se debió a un paro cardíaco súbito provocado por hipertrofia ventricular izquierda, un aumento anormal del grosor de las paredes de la cámara inferior del corazón.
Según los resultados de las investigaciones, el agua en la que Kellie se sometió estaba a una temperatura de 10,7 ° C, lo que para los forenses influyó significativamente en la causa de muerte súbita por una afección cardiaca que arrojó el dictamen de la muerte de Kellie Jean Poole.
Las terapias de agua fría
La experiencia que había adquirido Kellie era una de respiración e inmersión en agua fría con el instructor Kevin O’Neill, quien ofrece este servicio a través de su empresa Breatheolution, ubicada en Buxworth, Derbyshire en Inglaterra.
O’Neill cuenta con más de 18.000 seguidores en su cuenta de Instagram, donde comparte su trabajo, del que han participado varios clientes famosos en el Reino Unido, entre ellos Coleen Rooney y el actor Stephen Graham.
El instructor con el que Kellie pago su terapia se autodenomina como “Instructor avanzado de beneficios del oxígeno” y terapeuta especializado en el tratamiento con agua fría.
La empresa Breatheolution, ofrece esta terapia de inmersión en agua fría como una excelente alternativa que contribuye a mejorar la salud mental, reducir el estrés y fortalecer el sistema inmunológico de manera significativa.
A pesar de ello, los procedimientos de terapia en agua fría en Inglaterra no tienen ningún tipo de regulación, lo que hace que estas actividades puedan resultar peligrosas para algunas personas como lo fue para Kellie Jean Poole.
Cuya historia sirvió como un precedente para que de ahora en adelante las empresas o instructores que ofrecen este tipo de servicios sean más regulados, con el fin de evitar graves consecuencias o desenlaces fatales como el de la historia de esta mujer que murió al someterse a una terapia con agua fría en un río.
