España ya no entregará “visados dorados” a los extranjeros dispuestos a pagar mucho dinero por ellas para estar legalmente en ese país europeo.
El gobierno español anunció que planea eliminar el tipo de visa que permite a los ciudadanos no pertenecientes a la Unión Europea obtener permisos de residencia después de invertir al menos 500.000 euros, o 542.805 dólares, en bienes raíces.
Según la prensa del viejo continente se emitieron alrededor de 10.000 visas de este tipo desde el inicio del programa en 2013.
Los detalles exactos del fin del programa de visa dorada no se han resuelto, por lo que aún no está claro qué sucede con aquellos que ya invirtieron o se mudaron a España.
Las visas para inversionistas extranjeros, lanzadas por los países europeos para llenar los vacíos presupuestarios después de la crisis financiera global, han sido populares entre las personas que quieren mudarse a países con mejor calidad de vida.
Pero gobiernos como el español, que ofrecieron visas, ahora las ven como un riesgo político, ya que la vivienda asequible, especialmente para los jóvenes, se ha convertido en una de las principales preocupaciones.
Otros países en lo mismo
En el último año, Irlanda, los Países Bajos, Portugal y Grecia cerraron o endurecieron sus programas de visa dorada por razones similares.
La reforma de España se produce en un momento en que los precios de las viviendas se vuelven cada vez más inasequibles, especialmente para los jóvenes que luchan contra el alto desempleo.
La edad a la que los jóvenes abandonan el hogar de sus padres en España aumentó hasta los 30 años el año pasado, frente a la media de la UE de 26, según la OCDE.
El presidente español Pedro Sánchez dijo que la mayor parte de la inversión inmobiliaria de extranjeros se ha concentrado en ciudades españolas clave como Barcelona, Madrid y Valencia.
Y lo anterior ha llevado a que estas sufran una crisis inmobiliarias sin precedentes.
En esas ciudades, es “casi imposible encontrar una vivienda digna para quienes viven, trabajan allí y pagan sus impuestos todos los días”, dijo Sánchez a la prensa.
“Éste no es el modelo de país que queremos, no es la España que queremos”, remarcó el mandatario.
Altos precios en vivienda
Los precios de alquiler en España han aumentado un 40% en la última década, mientras que los salarios de los jóvenes han crecido menos del 10%, según la OCDE.
El país espera seguir atrayendo extranjeros a través de su visa de nómada digital, que se lanzó el año pasado. Esa visa no requiere inversión ni ofrece un camino hacia la ciudadanía.
De acuerdo con la consultora de migración de inversiones Henley & Partners en 2023 más latinos preguntaron sobre cómo volverse residente y ciudadano por inversión que en cualquier otro año.
El dato
Este tipo de visas también están ganando popularidad fuera de Europa.
En 2011, Nueva Zelanda concedió la ciudadanía al multimillonario cofundador de PayPal, Peter Thiel, que sólo había pasado 12 días en el país pero había realizado una serie de inversiones locales.
En 2018, Nueva Zelanda prohibió a los extranjeros comprar viviendas existentes tras una crisis de asequibilidad de la vivienda, similar a la situación actual de España y Portugal.
ETIAS
Los latinoamericanos que planean visitar Europa en 2024 no tienen que preocuparse todavía por solicitar el nuevo sistema de autorización de viajes de la Unión Europea.
Desde hace casi una década, las autoridades de la Unión Europea han estado trabajando en un sistema similar a un visado llamado Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes.
Es para viajeros de países “exentos de visa” como Estados Unidos y varios de América Latina como Colombia.
Después de varios años de retrasos, se esperaba que ETIAS estuviera en línea en 2024, pero ahora se ha retrasado hasta mediados de 2025 porque su base de datos de entrada/salida no está lista.
Con el tiempo, los viajeros de países exentos de visa que quieran ir a la mayoría de los países de la UE, así como a Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein, tendrán que registrarse en línea.
La mayoría de las personas tendrán que pagar una tasa de solicitud de 7 euros (7,70 dólares). Todos esos viajeros, incluidos los niños pequeños, deberán presentar una solicitud.
La UE dice que la mayoría de las solicitudes se procesarán en minutos, pero algunas tardarán días o semanas y requerirán información adicional, por lo que aconseja a las personas presentar la solicitud con mucha antelación a su viaje.
