La era del pasaporte en los aeropuertos podría estar llegando a su fin más pronto de lo que se pensaba.
Singapur ha anunciado su intención de reemplazar gradualmente el uso del pasaporte en sus aeropuertos a partir de la primera mitad de 2024.
En su lugar, se implementarán sistemas de control biométrico para algunos procesos de autenticación de pasajeros.
Este cambio significativo en la forma en que viajamos está respaldado por una enmienda a la ley de inmigración presentada recientemente en el Parlamento.
Singapur está liderando el camino hacia una nueva era en la que los pasaportes serán cosa del pasado en los viajes aéreos.
La ministra de Comunicación e Información, Josephine Teo, afirmó que Singapur «será uno de los primeros países en el mundo en introducir unos controles de inmigración automatizados y libres de pasaportes».
Hasta ahora, solo Dubái ha ofrecido sistemas similares para algunos viajeros.
La transición hacia los controles biométricos no será instantánea.
En una primera fase, se instalarán sistemas biométricos en varios puntos de la zona de salidas del aeropuerto, lo que significa que solo ciertos viajeros se beneficiarán de esta innovación.
Los pasaportes aún serán necesarios para aquellos que provengan de países que no cuenten con sistemas de autenticación biométrica.
El objetivo: agilizar el tránsito en el Aeropuerto
El aeropuerto Changi de Singapur, conocido por ser uno de los mejores del mundo, busca mejorar aún más la experiencia de los viajeros.
La implementación de controles biométricos tiene como objetivo principal acelerar el tránsito en este aeropuerto galardonado, que recientemente fue nombrado el mejor aeropuerto del mundo en los World Airport Awards de 2023.
A partir de 2024, los pasajeros que viajen desde Singapur podrán salir del país sin necesidad de mostrar su pasaporte.
En su lugar, se utilizarán datos biométricos, como el reconocimiento facial, para la autenticación. Esto eliminará la necesidad de llevar documentos físicos como tarjetas de embarque y pasaportes en múltiples puntos del viaje, desde la entrega de equipaje hasta el abordaje.
Singapur no es el único país que está explorando la implementación de sistemas de identificación biométrica en los aeropuertos.
En todo el mundo, se están adoptando tecnologías similares para agilizar los procesos de viaje. Por ejemplo, el Aeropuerto Internacional de Dubái ya utiliza túneles biométricos «Smart Gates» que verifican la identidad de los viajeros en segundos.
La eliminación gradual del pasaporte en los aeropuertos es un indicio de la creciente tendencia hacia una mayor automatización y simplificación de los viajes.
Si bien esta tecnología promete una experiencia más fluida para los viajeros, cabe destacar que los pasaportes seguirán siendo esenciales para los viajes internacionales hacia países que aún no han adoptado sistemas de autenticación biométrica.
A medida que la tecnología continúe avanzando, es probable que veamos más innovaciones en la forma en que viajamos, lo que podría hacer que los viajes sean más accesibles y eficientes para todos.
El futuro de los viajes está en constante evolución, y la identificación biométrica es solo un paso en esa dirección.