La legislatura de California aprobó un proyecto de ley con apoyo bipartidista que prohíbe el uso del colorante rojo No. 40 y otras cinco sustancias químicas en los alimentos que se sirven en las escuelas públicas.
El Estado Dorado se convirtió en el primero del país en aprobar un proyecto de ley que prohibiría el uso de los ingredientes que se encuentran en algunos cereales populares, helados, bebidas, dulces, paletas de hielo, gelatinas y más.
Según el Environmental Working Group, una organización de salud ambiental sin fines de lucro copatrocinó la ley con Consumer Reports.
El Proyecto de Ley 2316 de la Asamblea, conocido como la Ley de Seguridad Alimentaria Escolar de California fue presentada por el asambleísta demócrata Jesse Gabriel en febrero pasado.
Esta norma prohíbe a los distritos escolares, superintendente de escuelas del condado o escuela autónoma con grados desde jardín de infantes hasta 12.º ofrecer alimentos o bebidas que contengan colorante rojo n.º 40, colorantes amarillos n.º 5 y 6, colorantes azules n.º 1 y 2, y colorante verde n.º 3.
El gobernador de California, Gavin Newsom, tiene hasta el 30 de septiembre para convertir en ley el proyecto que, de legalizarse, se promulgaría el 31 de diciembre de 2027.
La importancia de su aplicación
California alberga el sistema escolar público más grande del país, con más de 6,3 millones de estudiantes y 10.000 escuelas, dijo Tony Thurmond, superintendente estatal de instrucción pública.
El proyecto de ley surge de la preocupación de que estos tintes podrían dañar la capacidad de aprendizaje de los niños.
Lo anterior, ya que se han relacionado con dificultades de comportamiento y disminución de la atención entre los niños.
Esto fue respaldado por un estudio de 2021 de la Oficina de Evaluación de Riesgos para la Salud Ambiental de California.
«La ley es importante para mí como padre, es importante para mí como alguien que luchó con el TDAH cuando era niño”, dijo Gabriel, un padre de dos niños.
“Sabemos que los colorantes alimentarios sintéticos que se ven afectados por este proyecto de ley pueden causar daño a todos los niños”, recalcó el padre de familia.
“Reevaluar la seguridad de las sustancias químicas en los alimentos es importante a medida que se dispongan de nuevos datos”, afirmó Environmental Working Group.
Lo que dicen las autoridades
La FDA ha revisado la investigación sobre los efectos de los colorantes en el comportamiento de los niños, incluida la revisión bibliográfica citada por el proyecto de ley.
La totalidad de la evidencia científica muestra que la mayoría de los niños no sufren efectos adversos cuando consumen alimentos que contienen colorantes.
Pero algunas pruebas sugieren que ciertos niños pueden ser sensibles a ellos.
Además de las propias evaluaciones de la FDA, la agencia también apoya y participa en evaluaciones de riesgos internacionales.
Estas son realizadas por el Comité Conjunto de Expertos en Aditivos Alimentarios de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y la Organización Mundial de la Salud.
“Todos los colorantes enumerados han sido recientemente evaluados en términos de seguridad en alimentos por la JEFCA y se determinó que son seguros para su uso en alimentos en las condiciones de uso actuales”, afirmó la FDA.
Sin embargo, la agencia continuará evaluando la ciencia emergente y garantizando la seguridad de los aditivos de color aprobados.
Incluso mediante la organización de una reunión pública en septiembre para revisar el proceso de evaluación posterior a la comercialización de sustancias químicas en los alimentos.
Impactos de la AB 2316
John Hewitt, de la Consumer Brands Association, que representa a más de 1.700 marcas, dijo en que «es desafortunado que ingredientes científicamente probados hayan sido demonizados con el propósito de promover una agenda política».
“Ninguna industria está más comprometida con la seguridad alimentaria que la industria de los bienes de consumo envasados”.
Agrega Hewitt que, “por ello han instado a la FDA a que reconozca enérgicamente su responsabilidad como regulador de la seguridad alimentaria del país”.
Thurmond destacó la mayor importancia del “costo de nuestro fracaso a la hora de actuar en una nación donde nuestros niños ya tienen algunas de las tasas más altas de enfermedad”.
Gabriel se hizo eco de estos sentimientos y agregó que el proyecto de ley podría ahorrar dinero a California al reducir el uso de recursos en la salud pública.