Encontrar vida fuera del planeta Tierra, durante siglos ha sido una de las investigaciones más fascinantes dentro del área científica, que busca hallar la posibilidad para que el ser humano migre a un nuevo planeta que sea habitable para las personas.
Es por eso que la ciencia dedica millones de recursos en tiempo y dinero en investigaciones y el desarrollo de artefactos que permitan identificar vida fuera del planeta, bien sea para comprobar la famosa teoría de que no estamos solos en el universo o para encontrar un lugar habitable para la raza humana.
Esta vez un nuevo descubrimiento encontró posibles señales de vida en un planeta lejano entre las profundidades del universo, un exoplaneta que investigan si podría ser habitable o tener vida extraterrestre.
El exoplaneta donde se encontraron posibles pruebas de vida
Los exoplanetas son planetas que se encuentran fuera de nuestro sistema solar, orbitando alrededor de estrellas diferentes al Sol.
Se trata del exoplaneta K2-18b, que se encuentra a unos 124 años luz de nuestro planeta, este exoplaneta que ha fascinado a los científicos, fue descubierto inicialmente en 2015 por el Telescopio Espacial Kepler.
Recibió el nombre de K2-18b, derivado de su estrella anfitriona, que es una enana roja conocida como K2-18.
Ahora, un nuevo descubrimiento en el exoplaneta K2-18b ha despertado un mayor interés, el telescopio espacial James Webb encontró presencia de metano y dióxido de carbono en la atmósfera del exoplaneta, que también podría
Las pruebas de vida en el exoplaneta K2-18b
Además, K2-18b también podría tener un océano de agua, otro hallazgo interesante es la detección de dimetilsulfuro o sulfuro de dimetilo (DMS), un compuesto que en la Tierra se produce principalmente debido a la actividad microbiana.
El sulfuro de dimetilo (DMS) es producido en la Tierra por organismos vivos, como fitoplancton y algunas bacterias marinas y puede desempeñar un papel en la formación de nubes y en la regulación del clima en nuestro planeta.
¿Se podría habitar el exoplaneta K2-18b?
Aunque se han encontrado moléculas de carbono en la atmósfera de K2-18b, la presencia de carbono no garantiza que el planeta pueda albergar vida.
Además, su tamaño, que es 2,6 veces mayor que el de la Tierra, sugiere un posible interior con un manto de hielo a alta presión que hacen la composición de este exoplaneta similar al de Neptuno.
Esto plantea incertidumbres sobre la habitabilidad del planeta y la posibilidad de vida en él, por lo que se requiere mayor investigación para comprender mejor las condiciones en K2-18b y su capacidad para sustentar vida.
A pesar de que las señales de vida que muestra este planeta de las profundidades del espacio son aún muy vagas y lejanas, si plantea la posibilidad de que exista vida fuera de la Tierra y del Sistema Solar.
Sin embargo, para los científicos es erróneo pensar de inmediato en la vida extraterrestre o en algún encuentro con un ser alienígena.
Los avances de la ciencia para encontrar vida extraterrestre
Con artefactos como el telescopio espacial James Webb, ha facilitado para la ciencia y los estudios astronómicos encontrando a mayor profundidad los componentes de los planetas externos a nuestro Sistema Solar.
Este asombroso descubrimiento, se suma a la expectativa en el mundo frente al último informe de la NASA para hallar vida extraterrestre y el verdadero origen de los Ovnis.
Que a pesar de no tener aún las pruebas suficientes para comprobarlo no descartan la posibilidad de que exista vida fuera de la que conocemos en el planeta.
Además de los dos supuestos cuerpos extraterrestres entregados en Congreso de México, por lo que cada vez crecen más las pruebas de que no estaríamos solos en el universo.
