Unos 500,000 inmigrantes indocumentados podrán solicitar su residencia gracias a un nuevo programa migratorio de la administración del presidente de los Estados Unidos Joe Biden que lleva por nombre ‘Parole in Place’.
En promedio, estos no ciudadanos han residido en Estados Unidos durante 23 años.
Además, aproximadamente 50,000 hijos de estos cónyuges también cumplirán los requisitos para este proceso.
Desde este 19 de agosto, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos establecerá un nuevo proceso para considerar, caso por caso.
Las solicitudes de ciertas personas casadas con ciudadanos o ciudadanas que hayan vivido en EEUU durante 10 años o más y que no representen una amenaza para la seguridad pública o la seguridad nacional y califiquen para solicitar un ajuste de estatus.
Los que puedan aspirar
Para poder aspirar a este tipo de residencia deberán cumplir con los siguientes requisitos:
Estar presente en Estados Unidos sin haber tenido una visa o un permiso de permanencia temporal.
Haber estado presente de forma continua en EEUU durante al menos 10 años antes del 17 de junio de 2024.
Tener un matrimonio legalmente válido con un ciudadano estadounidense antes del 17 de junio de 2024;
La persona que aspira no podrá tener antecedentes penales descalificatorios ni constituir de otro modo una amenaza para la seguridad nacional o la seguridad pública.
Las autoridades considerarán a ciertos hijos no ciudadanos de los solicitantes bajo este proceso, si antes del 17 de junio de 2024, estaban físicamente presentes en Estados Unidos.
Lo anterior, sin haber sido admitido ni tener permiso de permanencia temporal, y tienen una relación de hijastro cualificada con un ciudadano estadounidense.
Cifras sobre el aumento de la migración en EEUU
Las llegadas de migrantes a la frontera han aumentado a niveles récord durante la administración del presidente Joe Biden, un enorme dolor de cabeza político para él antes de las elecciones.
Las encuestas sugieren que más de dos tercios de los estadounidenses desaprueban la gestión del tema por parte de Biden.
Su probable oponente en las elecciones presidenciales de noviembre, Donald Trump, ha prometido reiteradamente restablecer y ampliar las políticas de inmigración de línea dura de su primer mandato.
Ha prometido además lanzar “la mayor operación de deportación interna” en la historia de Estados Unidos.
Pero no son sólo los republicanos los que están descontentos con la afluencia. Los alcaldes demócratas de ciudades que luchan por hacer frente a las cifras también están dando a conocer sus sentimientos.
Debido al descontento público, se espera que el presidente Biden presente una nueva y amplia orden ejecutiva destinada a frenar la llegada de migrantes a la frontera entre Estados Unidos y México.
Más de 6,3 millones de inmigrantes han sido detenidos al cruzar ilegalmente a Estados Unidos desde que Biden llegó a la Casa Blanca, una cifra mayor que durante las administraciones de Trump, Obama o George W. Bush.
La variedad en las cifras
La cifra comenzó a aumentar en 2018, en gran medida impulsada por los centroamericanos que huían de una serie de crisis complejas, como la violencia de las pandillas, la pobreza, la represión política y los desastres naturales.
Las detenciones volvieron a caer en el verano de 2019, lo que los funcionarios estadounidenses atribuyeron a una mayor aplicación de la ley por parte de México y Guatemala.
La reducción más drástica se produjo a principios de 2020, cuando las restricciones de la era de la pandemia llevaron a una reducción drástica de más del 53% entre marzo y abril de ese año.
Desde que se levantaron estas medidas a principios de 2021, las cifras han aumentado de manera constante, hasta alcanzar un máximo histórico de poco más de 302.000 en diciembre de 2023.
Altas cifra de migrantes
Los aumentos en las cifras de migrantes observados en la frontera entre Estados Unidos y México en los últimos años también se producen en un momento en que, a nivel mundial, la migración hacia los países ricos está en su nivel más alto.
Las estadísticas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) publicadas a finales del año pasado muestran que 6,1 millones de nuevos migrantes permanentes se trasladaron a sus 38 estados miembros en 2022, un aumento del 26% respecto a 2021 y un 14% más que en 2019.
En 2022, el número de personas a las que se les concedió asilo en Estados Unidos se duplicó, en gran medida gracias a migrantes de Venezuela, Nicaragua y Cuba.
Estados Unidos ocupa ahora el segundo lugar, después de Alemania, en cuanto a niveles de migración humanitaria.
“Estamos experimentando un desplazamiento en todo el mundo a un nivel nunca visto en la historia registrada, y la gente está llegando a nuestra frontera sur por una variedad de razones diferentes”, explicó Jorge Loweree, director general de programas del Consejo Americano de Inmigración.