El presidente de Venezuela y hoy candidato presidencial Nicolás Maduro pasó de negar el fenómeno de la migración a la creación de un viceministerio para que atienda a quienes salieron de ese país por la crisis que vive esta nación.
Esta idea, la plantea a un mes de la elección para elegir al jefe del Ejecutivo venezolano que será puntualmente el próximo 28 de julio, en la que buscará su segunda reelección.
Maduro reiteró su llamado a los migrantes venezolanos para que regresen al país, que será, según él, “el asombro de Sudamérica”.
“Pasamos roncha (dificultades), pero dura, y ya vamos mejorando, recuperándonos, vénganse todos”, afirmó Maduro durante un acto político por el canal estatal VTV.
Lo que promete
El Viceministerio de Atención para la Migración Venezolana, que anunció Maduro, se encargaría de ayudar a regresar a ese país a quienes “tuvieron que migrar” y que ahora quieran volver.
El mandatario ya se ha trazado unos cuatro compromisos para atender a la población migrante que decida retornar al país:
- Brindar asistencia jurídica e identidad garantizada: Para que los venezolanos en el extranjero puedan tener documentos de identidad como cédulas y pasaportes dentro de territorio nacional.
- Atención en educación: Promete ofrecer programas gubernamentales para que los venezolanos que retornen puedan terminar estudios de educación secundaria o universitaria.
- Protección socioeconómica: Maduro ofrece ayudas económicas al migrante, con o sin fondos iniciales, para invertir en emprendimientos y negocios.
- La Comunicación: En este apartado, el presidente ha señalado que busca brindar espacios de diálogo para que, según él, “se diga la verdad sobre nuestros migrantes” y que puedan volver al país.
Piedras en el camino para las elecciones
El Consejo Nacional Electoral revocó una invitación a la Unión Europea para enviar una misión de observación electoral antes, durante y después de los comicios del 29 de julio.
Asimismo, el canciller colombiano Luis Gilberto Murillo anunció que su país no enviará observadores, lo cual plantea serias dudas sobre los esfuerzos del presidente Gustavo Petro para fomentar una competencia justa.
Aunque el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha pedido una “amplia presencia” de observadores, el Tribunal Superior Electoral del país no enviará tampoco una misión a las elecciones venezolanas.
Al cierre de esta nota, las Naciones Unidas y el Centro Carter aún están considerando sus respuestas a las invitaciones de Venezuela para llevar a cabo sus misiones electorales.
Aunque los observadores independientes no necesariamente eviten el abuso de poder del gobierno, sí pueden ayudar a los votantes a sentirse más seguros al emitir sus votos.
Los observadores internacionales independientes podrían monitorear y proporcionar informes confiables sobre lo que sucede en terreno.
Hace unos días, los líderes del G7 reunidos en Italia, instaron a Maduro a reconsiderar decisiones recientes:
“Instamos a Venezuela a implementar plenamente el Acuerdo de Barbados y garantizar elecciones competitivas e inclusivas el 28 de julio, que incluyan misiones de observadores electorales internacionales”, dijeron desde el G7.
Obstáculos para los votantes en el extranjero
Según el Consejo Nacional Electoral, las residencias de los venezolanos en el extranjero deben ser válidas por al menos un año y tener una fecha de expiración al menos tres años después, añadió.
De los 22,000 venezolanos elegibles para votar en países como Uruguay, solo 37 pudieron registrarse, según Mi Voto Cuenta, una plataforma que documenta irregularidades en los registros en el extranjero.
De los más de 4 millones de venezolanos en el extranjero que son elegibles para votar (alrededor del 22% del electorado), solo 69,000 pueden hacerlo actualmente, según More Consulting, una firma de encuestas con sede en Caracas.
El Consejo Nacional Electoral permitió que 508 personas se registraran en el extranjero y 6,020 actualizaran su información en el registro oficial en 2024, según informes de Mi Voto Cuenta.
La plataforma registró casi 3,200 quejas de irregularidades en 46 consulados de 35 países.
Con estas restricciones en el extranjero, votar en Venezuela se vuelve aún más importante, y hacerlo libremente no será fácil.
Muchos venezolanos que están registrados en ese país viven actualmente lejos de los centros de votación y enfrentan desafíos logísticos para movilizarse, como la escasez de combustible.
- Imagen de portada tomada/Agencia de Noticias EFE
