Investigaciones y experiencias personales sugieren que hablar contigo mismo puede ser señal de una mente aguda.
Si a menudo encuentras consuelo y claridad verbalizando tus pensamientos, podrías ser un aprendiz auditivo.
El “diálogo interno” es un método mediante el cual los aprendices auditivos validan sus pensamientos escuchándolos en voz alta.
Esto es particularmente útil para quienes nos esforzamos por comprender el mundo a través de la información auditiva. Ayuda a organizar y procesar ideas complejas.
Por ejemplo, cuando muchas personas están solas, suelen imaginar escenarios y hablar entre ellos mismos como si fuera una conversación.
Puede parecer peculiar, pero es una técnica que me ayuda a resolver problemas y explorar nuevas ideas. Es como tener un diálogo interno que guía mi toma de decisiones y potencia mi creatividad.
Te permite preparate para algunas situaciones futuras
Hablar contigo mismo puede simplificar situaciones complejas. Al verbalizar tus pensamientos, desglosas los problemas y escuchas tu propio razonamiento.
Esto facilita encontrar soluciones y avanzar con mayor eficiencia. Es como tener una lluvia de ideas contigo mismo, explorando diferentes perspectivas e ideas.
Además, este hábito puede llenar vacíos sociales. Si te encuentras en una situación donde no hay mucha gente alrededor, hablar contigo mismo puede ser una forma reconfortante y productiva de mantenerte conectado.
Es una forma de autodiálogo que te acompaña y te ayuda a mantener la concentración.
Es algocompletamente común
No hay nada de malo en hablar contigo mismo. De hecho, es parte natural de la experiencia humana para muchas personas.
Es una herramienta para la autorreflexión, la resolución de problemas y el pensamiento creativo. Acéptalo como parte de tu conjunto de herramientas cognitivas en lugar de verlo como algo inusual o malo.
Alguno expertos relatan que hablar consigomismo es una herramienta invaluable para gestionar ideas y mantenerte productivo. Es una forma de articular loss pensamientos y comprender el mundo que me rodea.
Así que, si eres de este tipo de personas, podrías ser simplemente una señal de tu fortaleza intelectual. No es un signo de locura, sino más bien un posible indicador de una mente altamente funcional y creativa.
Beneficios del diálogo interno
Cuando el diálogo interno se expresa de forma positiva y alentadora, puede ser útil de varias maneras. El diálogo interno positivo puede ayudarte a:
- Evite ceder a los impulsos.
- Guíate a través de situaciones desafiantes.
- Manténgase encaminado hacia sus objetivos.
Los investigadores también creen que, al ayudar a las personas a afrontar situaciones difíciles, el diálogo interno positivo puede reducir los signos fisiológicos del estrés.
El diálogo interno positivo puede:
- Mejorar la atención y la concentración.
- Solidificar promesas y compromisos con uno mismo.
- Hacer que las tareas mentales y físicas parezcan menos desafiantes.
- Mejorar las habilidades de resolución de problemas.
- Aumentar la motivación.
- Mejor salud cardiovascular.
- Fortalecer el sistema inmunológico.
- Reducir la depresión y la angustia.
- Hablarse con compasión puede reducir la ansiedad, la preocupación, la vergüenza y la autoculpa.
Mejora la capacidad de afrontar desafíos personales, perdonar errores y regular emociones y comportamientos, todo lo cual es sumamente saludable.
Cuándo no es normal
El diálogo interno a menudo refleja cómo nos sentimos con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. Cuando esos sentimientos son negativos, el diálogo interno puede amplificarlos.
El diálogo interno frecuente puede provocar depresión, baja autoestima y otros problemas de salud mental.
Si bien muchas personas utilizan el diálogo interno para procesar sus procesos mentales, ser demasiado conscientes de ellos puede llevar a pensamientos y comportamientos obsesivo-compulsivos.
Las formas de diálogo interno negativo y potencialmente dañino incluyen:
- Filtrado: centrarse solo en lo negativo e ignorar o filtrar lo positivo.
- Catastrofizar: asumir que el peor resultado posible es el más probable.
- Personalizar: Creer que cada acontecimiento negativo es culpa tuya.
- Polarización: verse a uno mismo como completamente bueno o completamente malo.
Las investigaciones también respaldan la idea de que algunas personas que hablan consigo mismas con más frecuencia lo hacen por soledad o porque no tienen relaciones sociales saludables o suficientes.
Cuándo visitar a un médico
Si bien el diálogo interno suele ser beneficioso, a veces puede indicar la necesidad de apoyo profesional.
El diálogo interno negativo o crítico puede crear una narrativa negativa que afecta tu autoestima y bienestar general.
Si le resulta difícil dejar de hablar consigo mismo, se siente excesivamente ansioso o nota que su diálogo interno se vuelve cada vez más negativo, tal vez sea momento de buscar ayuda.
En particular, si experimenta alguno de los siguientes síntomas, es importante consultar a un profesional de salud mental:
- Escuchar voces que no creaste conscientemente.
- Respondiendo a múltiples voces a la vez.
- Experimentar sensaciones adicionales, como sonidos, olores o imágenes vívidas que en realidad no existen.
Un profesional de la salud mental puede ayudarle a evaluar sus síntomas y ofrecerle el tratamiento o las estrategias de afrontamiento adecuadas.
Buscar apoyo temprano puede marcar una diferencia significativa en el manejo de su salud mental.
- Imagen deportada tomada/Pexels