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Italia anuncia decreto que permitirá a más extranjeros laborar legalmente en el país y estos son los países de Latinoamérica que aplican

El nuevo decreto italiano abre un camino legal para trabajadores extranjeros en sectores donde la demanda supera a la oferta local.

Qué es el Decreto Flussi

El Decreto Flussi es el mecanismo con el que Italia define cuántos trabajadores extranjeros pueden ingresar legalmente al país cada año. Su propósito es cubrir vacantes que no logran atenderse con la mano de obra local, especialmente en sectores donde la demanda crece más rápido que la oferta.

La nueva versión, válida para el periodo 2026-2028, amplía los cupos de entrada y refuerza la cooperación con países considerados prioritarios en la gestión de movilidad laboral. Italia prevé más de ciento sesenta mil permisos para 2026 y cerca de quinientas mil entradas acumuladas durante los próximos tres años, una cifra que refleja la necesidad urgente de personal en múltiples industrias.

Cuáles son los países latinoamericanos incluidos

Italia incluyó a Ecuador, Perú y El Salvador dentro de la lista de países con acceso preferencial en el Decreto Flussi. Esto significa que los ciudadanos de estas naciones pueden participar en los procesos de selección que realicen las empresas italianas y aplicar a los permisos disponibles de forma legal y regulada.

La inclusión no garantiza un empleo automático, pero sí abre un camino formal que permite competir en igualdad de condiciones por las vacantes que se publiquen en cada sector.

Sectores italianos con mayor demanda laboral

El Decreto Flussi prioriza la contratación de trabajadores extranjeros en áreas donde la escasez de personal es más evidente. La economía italiana enfrenta desafíos en industrias que requieren perfiles técnicos, operativos y de asistencia, especialmente en regiones afectadas por el envejecimiento poblacional.
Entre las actividades con más oportunidades se encuentran construcción, mecánica industrial, transporte, logística, hotelería, agricultura, manufactura, textil, asistencia a personas mayores y servicios privados de salud. Estos sectores registran una demanda constante y necesitan trabajadores capaces de cubrir funciones que hoy no logran atenderse con los recursos disponibles dentro del país.

Profesiones que podrían beneficiarse

El Decreto Flussi permite que diversas profesiones accedan a los cupos ofrecidos por Italia. Entre los perfiles más solicitados se encuentran enfermeros con experiencia en cuidados clínicos, cuidadores de adultos mayores en entornos domiciliarios o institucionales, mecánicos automotrices especializados en reparación y mantenimiento, operadores industriales, soldadores capacitados, conductores profesionales con certificaciones vigentes, técnicos agrícolas, personal de hotelería, operarios de fábricas y trabajadores de logística.
Estos perfiles reflejan áreas donde las empresas italianas enfrentan dificultades para encontrar talento local, lo que ha impulsado la apertura a contratar personal extranjero de manera más estructurada.

Cómo funciona el proceso de acceso

Para beneficiarse del Decreto Flussi, el procedimiento empieza con una empresa italiana que identifica la necesidad de contratar a un trabajador extranjero. La compañía presenta una solicitud oficial ante las autoridades y, si es aprobada, el candidato puede pedir la visa correspondiente en su país de origen.
Una vez en Italia, el trabajador formaliza su estancia mediante un permiso de residencia laboral. Este permiso puede renovarse mientras exista un contrato vigente y el trabajador cumpla con los requisitos establecidos por la ley italiana.
El proceso está diseñado para garantizar seguridad jurídica, evitar abusos y asegurar que los cupos se utilicen en los sectores donde realmente se necesitan.

Ventajas y retos para los latinoamericanos incluidos

La inclusión de Ecuador, Perú y El Salvador en el Decreto Flussi abre una oportunidad real para que sus ciudadanos accedan a empleos legales en Italia. Para los trabajadores, esto significa contratos verificables, procesos transparentes y permisos de residencia vinculados a actividades laborales auténticas.
Sin embargo, también existen desafíos. Los cupos son limitados, el nivel de competencia es alto y muchos empleadores solicitan conocimientos básicos de italiano, experiencia demostrable o certificaciones técnicas específicas. Por eso, es esencial que los interesados se informen bien, cumplan con los requisitos y eviten intermediarios no autorizados.
La medida no garantiza residencia permanente ni ciudadanía, pero sí establece un camino claro para integrarse al mercado laboral italiano bajo reglas legales y renovables.

Qué representa este decreto para la región

El Decreto Flussi consolida un marco de cooperación entre Italia y los países latinoamericanos incluidos, lo que podría fomentar procesos de reclutamiento más ordenados y reducir la migración irregular. Para quienes buscan nuevas opciones laborales en Europa, esta actualización representa una puerta concreta hacia uno de los mercados más relevantes del continente.
Italia, por su parte, apuesta por un modelo que equilibra su demanda interna con una apertura controlada y profesionalizada hacia trabajadores extranjeros.

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