Una grave revelación se dio a conocer en las últimas horas en una emisora colombiana que pone contra las acuerdas a una familia de ese país.
Lo anterior, tras la revelación de un informe periodístico del medio mexicano Eje Central en la que vincula a la familia Char con una presunta participación para expandir El Cartel de Sinaloa.
Según el reportaje, la información fue proporcionada por la agregación militar de la embajada de México en Bogotá.
Esta data del año 2021, en el que se daba cuenta de los nexos entre el clan caribeño con el grupo narcotraficante mexicano.
Este cartel es dirigido en la actualidad en la familia por Ismael Zambada García, más conocido como ‘El Mayo’, y ‘Los Chapitos’, hijos de Joaquín Guzmán Loera ‘El Chapo’.
Este último actualmente purga una condena en una cárcel de Estados Unidos.
El caso es tan delicado en el país suramericano que hasta el mismo presidente de la República Gustavo Petro ha pedido que investiguen al banco Serfinanzas que pertenece a la familia colombiana.
Y es que la entidad financiera haría parte de esta presunta trama de expansión del cartel.
“Le solicitará a la Superintendencia Financiera de Colombia abrir una investigación para esclarecer los hechos denunciados en contra del banco de la familia Char”, escribió el mandatario en su cuenta de X.
Lo que dice el reporte oficial
El informe del gobierno mexicano dice que “aparecen dos nombres clave, el de los hermanos Alejandro y Arturo Char Chaljub, como personas de interés”. Al parecer relacionados con esta operación de expansión y control del Cártel del Pacífico en Colombia.
El medio mexicano señala que “dos emisarios de diferentes facciones de la señalada estructura criminal transnacional se reunieron en la Casa Blanca”
“Esto habría sido en la famosa finca de la familia colombo-árabe en el departamento del Atlántico”.
Dice el medio que la reunión habría sido con Alejandro Char, -el mismo que lidera las encuestas para repetir como alcalde de Barranquilla-.
Lo que pidieron los carteles
El documento de inteligencia en manos del medio mexicano dice que:
“Es del interés de estas estructuras criminales tomar el control de los puertos de Cartagena, Barranquilla y Santa Marta”.
Esto sería “para garantizar sus rutas de tráfico de cocaína a nuestros puertos en la península de Yucatán o sus nuevas rutas hacia África y Europa”.
Hay que anotar que esta información fue revelada por una red de hackers mexicanos, en un caso que se conoció en México como el Guacamayas Leaks.
Incluso en el citado expediente dan cuenta de la identidad de las personas que enviaron los narcotraficantes mexicanos a Colombia.
Dice la investigación que “el mexicano Abel Díaz Ruiz debía estar presente en Cartagena y Barranquilla, con la finalidad de garantizar la logística marítima de sus rutas”.
Así las cosas, las autoridades de México explican que la familia Char habría utilizado su entidad financiera para facilitar el lavado de activos del cártel.
El banco Serfinanzas
En medio relata que el informe dice que:
“La fuente ‘A-1′ manifiesta que con la finalidad de garantizar su capacidad operativa, han construido un aparato financiero para movilizar a través del sistema bancario colombiano”.
Esto “para que los ingresos derivados de sus actividades criminales llegaran hasta México”.
Según explica la información, el propósito de Díaz fue tener reuniones en la famosa Casa Blanca, y en donde estuvo 3 veces:
“para cuadrar todo para utilizar el Banco Serfinanza para enmascarar sus operaciones financieras hacia México”.
Dice la nota que la inteligencia mexicana identificó los números telefónicos desde donde se comunicaba el enviado de la familia ‘El Mayo’ con los Char.
El contacto coincide con el hoy candidato a la alcaldía de Barranquilla Alejandro Char.
Recalca la información de la embajada mexicana en Bogotá que desde Serfinanzas se habría enviado dinero a varias ciudades de México.
Hay que recordar que no es la primera vez que la familia Char aparece vinculada con el narcotráfico.
En febrero de 2022 La Liga Contra El Silencio, revelaron una información en ese sentido.
En ese entonces mencionaba que el clan comercializaba marihuana y cocaína según documentos oficiales de las autoridades de los Estados Unidos.
Apoyada de 78 cuadernos y 16.000 folios de la Fiscalía que datan de la década de 1990 e inicios de la primera del 2000.