Una idea un poco inesperada para algunos expertos ha surgido por parte de un grupo de científicos sobre una posible solución al cambio climático.
Se trata de una propuesta con la que se podría enfriar el planeta interviniendo la estratosfera.
La idea consiste en eliminar el agua del aire antes de que entre en la estratosfera en donde empieza a actuar como un gas de efecto invernadero según son especialistas
El físico y autor del estudio, Joshua Shuka Schwarz, aseguró que la mayor parte de este aire está entrando en la zona de los trópicos; por lo que la estrategia podría empezar por estas zonas.
Dice el investigador a la opinión pública que en los análisis se logró identificar una zona en Australia para adelantar este proceso que sin duda sería de gran ayuda para el mundo y los seres humanos.
Allí se podría controlar el movimiento ascendente del aire y el vapor de agua para poder hacer que la estratosfera no atrape el calor, sino que lo deje liberar hacia el espacio, dijo Shuka.
Así es la idea
Según las informaciones, este equipo de expertos a través de un experimento junto con la NASA utilizaron un modelo informático para simular cómo se daría la eliminación del vapor de agua del aire antes de que entre en la estratosfera.
La propuesta, que fue publicada en la revista Science Advances, contempla atrapar este vapor por lo que es necesario que haya suficiente hielo para congelarlo o se vuelva una nube de hielo.
Los investigadores evaluaron la posibilidad de sembrar este aire en la zona de Australia.
Al tiempo que informaron que “allí se inyectaría unas partículas nucleantes de hielo (triyoduro de bismuto) para generar este efecto”.
Dicen los conocedores del tema que este proceso permitiría deshidratar la estratosfera y compensar el calentamiento que se está generando por el cambio climático.
Los científicos se han mostrado tranquilos ante posibles efectos secundarios; ya que aseguran que el vapor de agua sufre cambios de forma natural en la atmósfera.
Qué es el cambio climático
El cambio climático es el cambio a largo plazo en los patrones climáticos promedio en todo el mundo.
Desde mediados del siglo XIX, los humanos han contribuido a la liberación al aire de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero.
Esto hace que las temperaturas globales aumenten, lo que resulta en cambios climáticos a largo plazo.
En los 11.000 años anteriores a la Revolución Industrial, la temperatura media en todo el mundo se mantenía estable en torno a los 14°C.
La Revolución Industrial comenzó a mediados del siglo XIX, cuando los humanos comenzaron a quemar combustibles fósiles como carbón, petróleo y gas como combustible.
La quema de combustibles fósiles produce energía, pero también libera al aire gases de efecto invernadero como dióxido de carbono, metano y monóxido nitroso.
Con el tiempo, grandes cantidades de estos gases se han acumulado en la atmósfera.
Una de sus causas
Cuando los gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono, se acumulan en la atmósfera, actúan como una manta alrededor de la Tierra.
Cuando la luz solar (principalmente radiación de onda corta) incide sobre esta manta, la atraviesa y continúa hasta llegar a la superficie del planeta.
Luego, la Tierra absorbe esta luz solar y emite un tipo diferente de luz, radiación infrarroja de onda más larga, de regreso al espacio. Al salir de la atmósfera, la radiación infrarroja también incide en la capa de gases de efecto invernadero.
La mayor parte pasa directamente, pero una parte es absorbida y regresa a la tierra. Esto atrapa la radiación infrarroja y hace que la superficie se caliente, un proceso que llamamos “efecto invernadero”.
Es fundamental comprender que el efecto invernadero es fundamental para la vida en la Tierra.
Sin una capa de gases de efecto invernadero que atrapen el calor, la temperatura sería terriblemente fría y los humanos no podrían sobrevivir.
Al agregar gases de efecto invernadero adicionales a la atmósfera, los humanos han creado un efecto invernadero mejorado.