El controvertido expresidente Donald Trump se lanzó nuevamente a la carrera por la Casa Blanca para el año 2024.
De acuerdo con el multimillonario, Estados Unidos está “de regreso” ahora mismo, el ahora candidato a cientos de simpatizantes congregados en su residencia de Mar-a-Lago en Florida.
“Para hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande y glorioso anuncio esta noche mi candidatura a la presidencia de Estados Unidos”, dijo Trump.
La entrada temprana de Trump en la carrera por la Casa Blanca se considera un intento de adelantarse a otros republicanos y de evitar posibles cargos penales por investigaciones de las que es objeto.
En un discurso de una hora, Trump elogió, y en ocasiones exageró, sus logros como el presidente número 45 de Estados Unidos y atacó verbalmente al presidente Joe Biden.
“Me aseguraré de que Biden no logre cuatro años más”, prometió Trump, mientras el presidente reaccionó al anuncio con un tuit diciendo: “Donald Trump le falló a Estados Unidos”.
Candidatura con varias desventajas potenciales
Es objeto de múltiples investigaciones sobre su conducta antes, durante y después de su primer mandato como presidente, lo que en última instancia podría resultar en su descalificación.
Le investigan por presunto fraude en sus negocios familiares, por su papel en el ataque de sus simpatizantes el año pasado al Capitolio.
Asimismo, su intento de anular las elecciones de 2020 y su ocultación de documentos clasificados en Mar-a-Lago.
En el bando republicano las heridas están abiertas después de las elecciones intermedias. Algunos están convencidos que no han conseguido mejores resultados debido al fracaso de protegidos de Trump.
Donald Tiene varios rivales de peso que le hacen sombra para las primarias de 2024, sobre todo el gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien obtuvo una contundente victoria en la reelección el 8 de noviembre.
Finalmente, sigue teniendo prohibido el acceso a Facebook y Twitter, que fueron fundamentales en su impresionante ascenso político.
Los que se dijo a él mismo
En su discurso del martes, Trump atacó a Biden por la inflación, la delincuencia y la inmigración.
Al tiempo, se burló del cambio climático y se felicitó por derrocar al Estado Islámico, mantener bajo control a Corea del Norte y construir un muro fronterizo con México.
“Bajo nuestro liderazgo, éramos una nación grande y gloriosa. Pero ahora somos una nación en declive”, dijo Trump.
“Esta no es solo una campaña, es una cruzada para salvar a nuestro país”.
“En dos años, la administración Biden ha destruido la economía estadounidense”, afirmó. “Con una victoria volveremos a construir la mejor economía de la historia.
Biden, de 79 años, tiene la intención de volver a presentarse, pero tomará la decisión a principios del próximo año.
Hay que recordar que, los republicanos fracasaron en su intento de arrebatar el control del Senado a los demócratas.
El fuerte rival de Donald Trump
Por el momento, DeSantis, de la derecha dura, parece el principal posible rival de Donald Trump en un campo republicano que será bastante amplio.
Pues podría a incluir al ex vicepresidente Mike Pence, el senador de Texas Ted Cruz, el gobernador de Virginia Glenn Youngkin, el exsecretario de Estado Mike Pompeo y la exgobernadora de Carolina del Sur Nikki Haley.
DeSantis, de 44 años, apodado “Ron el Mojigato” por Trump, invitó a “la gente a revisar el marcador del martes pasado por la noche”, día de los comicios.
Sin nombrar a Trump, también sugirió que una candidatura republicana encabezada por el expresidente tendría problemas para atraer a votantes independientes “incluso con Biden en la Casa Blanca y los fracasos que estamos viendo”.
Trump y sus escándalos como presidente
Durante sus cuatro años el magnate del sector hotelero había marcado una impronta distinta con su tono directo y confrontativo.
Sus ataques a medios y a opositores, sus exabruptos públicos y sus dilemas judiciales, todo eso quedó opacado por los turbulentos dos meses finales.
La negación de aceptar su derrota en las elecciones presidenciales del 3 de noviembre llevó a Trump a repetir incansablemente denuncias infundadas de fraude.
Un discurso incendiario que prendió entre sus seguidores y que tuvo su corolario en el asalto al Capitolio del 6 de enero.
Un hecho que le ha valido un segundo ‘impeachment’, el triste récord con el que se despedió de su presidencia.
La Cámara de Representantes aprobó los cargos de obstrucción al Congreso y abuso de poder e inició el juicio político contra Donald Trump.
El tercer presidente en ser sometido a un ‘impeachment’. Finalmente, y a principios de 2020, el Senado, de mayoría republicana, absolvió al mandatario por la vía rápida, sin llamar a testigos a declarar.
Pero las tormentas políticas acompañaron a Trump desde el inicio de su presidencia. El primer gran escándalo fue la presunta intervención de Rusia para beneficiar a su campaña presidencial en 2016.
El entonces director del Buró Federal de Investigaciones (FBI), James Comey, anunció al Congreso una investigación sobre una posible conspiración entre los miembros de la campaña de Trump y Moscú.
Lo anterior, al parecer para menoscabar a la rival demócrata en los comicios presidenciales de 2016, Hillary Clinton.
Ese movimiento le costó el puesto a Comey y desató la ira del presidente, quien calificó toda la investigación como una “cacería de brujas” en su contra.
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