Los jóvenes en edad universitaria, es decir la generación Z tienen cierta reputación en lo que respecta al consumo de alcohol.
Es una visión moldeada por la ruidosa fraternidad Delta en “Animal House”, la OG en lo que respecta al género cinematográfico de fiestas.
Sin embargo, esa idea puede ser tan anticuada como esa película clásica.
Las investigaciones muestran que la generación Z que ahora asiste al campus parece beber mucha menos cerveza y alcohol que las generaciones anteriores.
Y esto no es simplemente un cambio aleatorio en las cifras: “Los adultos más jóvenes están bebiendo menos alcohol, y la tendencia ha estado en esa dirección durante dos décadas”, dice el psiquiatra de adicciones Akhil Anand, MD .
Entonces, ¿qué hay detrás de esta tendencia? ¿Significa esto que las preocupaciones por el consumo de alcohol y drogas están desapareciendo entre la Generación Z, definida en términos generales como aquellos nacidos entre 1997 y 2010? Analicemos más de cerca esta situación con el Dr. Anand.
Lo que han encontrado
En 2018, el 28% de los estudiantes universitarios declararon abstenerse de consumir alcohol. En 2002, la cifra era del 20%.
Los adultos jóvenes que no asisten a la universidad tenían incluso más probabilidades de evitar el alcohol.
Casi el 30% de este grupo en 2018 informó que no bebía cerveza, vino ni licores. En 2002, esa cifra era de alrededor del 24%.
¿Qué tan notoria es la tendencia? Digámoslo de esta manera: a principios de este año, los locales de música que organizaban conciertos dirigidos a la generación Z informaron de caídas significativas en las ventas de alcohol durante los eventos.
Concientización sobre la salud mental
Hace años, la gente recurría al alcohol para sobrellevar el estrés de la vida. Por eso, “ahogar las penas” se convirtió en una frase muy conocida.
Pero en el mundo actual, la gente habla mucho más abiertamente sobre la depresión, la ansiedad y otros problemas de salud mental, explica el Dr. Anand.
Existe la comprensión de que estos sentimientos son parte de la condición humana y que el alcohol no es una solución.
“El alcohol es un depresor y nunca es la solución a un mal día”, afirma el Dr. Anand. “La generación Z parece entender ese concepto y ha tomado una dirección diferente”.
Estilos de vida más saludables
El estilo de vida de “vida limpia” adoptado por muchos miembros de la Generación Z implica tomar decisiones más saludables en lo que respecta a la comida y la bebida.
Es una de las fuerzas que impulsan el aumento de las ventas de alimentos orgánicos y productos como el kombucha .
El alcohol es una toxina que no encaja exactamente en esa mentalidad de cuidar el cuerpo, señala el Dr. Anand.
La creciente popularidad del “enero seco”, en el que las personas se comprometen a no beber durante el mes, es otro ejemplo de un proceso de pensamiento en acción.
Dejar el alcohol también puede traer beneficios para la salud como:
- Sueño mejorado.
- Bajar el colesterol.
- Presión arterial reducida.
- Mayor energía.
- Función hepática mejorada.
- Pérdida de peso.
Sigue siendo razón de preocupación
Si bien algunos miembros de la generación Z se han alejado del alcohol, muchos de sus pares siguen bebiendo cerveza, vino y licor en exceso (el consumo excesivo de alcohol se define como beber cinco o más tragos en el caso de los hombres y cuatro o más tragos en el caso de las mujeres en una sola ocasión).
“El consumo excesivo de alcohol es más frecuente entre los adultos jóvenes y puede ser muy perjudicial”, afirma el Dr. Anand.
“Incluso estamos observando un aumento de enfermedades hepáticas graves en personas jóvenes debido al consumo excesivo de alcohol”.
Lo que se preguntan los expertos
¿Hay señales positivas que involucren tendencias en el consumo de alcohol y en los trastornos por consumo de alcohol? Por supuesto, dice el Dr. Anand.
Pero ese movimiento no borra la realidad de que la adicción sigue siendo un problema de salud importante.
El aumento del consumo de cannabis y otras drogas también merece mayor atención.
“Hay un nuevo panorama en el consumo de drogas entre los adultos jóvenes”, continúa.
“Es bueno ver que hay más conciencia sobre el consumo de alcohol, pero todavía vemos extremos con el alcohol y otras sustancias», agrega Anand.
“Si usted o alguien que conoce tiene problemas de adicción, sepa que hay ayuda disponible. Acuda a su proveedor de atención médica, a su familia o a sus amigos. Nadie tiene por qué afrontarlo solo”.