La mayor parte de lo que se sabe sobre los riesgos de cocinar en microondas es hipotético y depende de otros factores, como los plásticos en los que se cocinan los alimentos.
En teoría, la exposición de ciertos alimentos y plásticos a la radiación de microondas puede generar sustancias cancerígenas, llamadas carcinógenos.
Los microondas también pueden agotar los nutrientes que protegen contra el cáncer.
Investigaciones actuales sobre el riesgo de cáncer que suponen los microondas y la cocción en microondas.
También describe los beneficios de cocinar en microondas y ofrece consejos sobre cómo utilizarlos de forma segura.
Cómo funciona la exposición potencial
Un horno microondas funciona gracias a un dispositivo llamado magnetrón, que convierte la electricidad en energía de microondas.
Cuando se coloca un alimento en un horno microondas, la energía hace que las moléculas de agua del alimento vibren.
Estas vibraciones generan calor sin alterar la estructura del alimento.
Cuando un horno microondas funciona correctamente (y el sello de la puerta está intacto), se filtra muy poca energía de microondas.
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), la cantidad emitida está muy por debajo del nivel que es nocivo para los humanos.
Aumento del riesgo
Aunque la radiación de los hornos microondas no causa cáncer, cocinar en microondas puede suponer un riesgo indirecto debido a sus efectos sobre los alimentos o los recipientes en los que se cocinan.
Existe una posibilidad, aunque pequeña, de que los microondas puedan crear carcinógenos en configuraciones de potencia más altas.
Éstas incluyen:
Acrilamidas: Estos carcinógenos se forman cuando los azúcares y los almidones se calientan a altas temperaturas. Los niveles altos de microondas también pueden tener el mismo efecto. 2
Bisfenol A (BPA): Es una sustancia potencialmente cancerígena que se utiliza para hacer que los plásticos sean duros y transparentes. En teoría, el BPA puede filtrarse en los alimentos cuando se calientan en exceso.
Ftalatos: Son compuestos potencialmente cancerígenos que se añaden a los plásticos para hacerlos más blandos y flexibles. También pueden filtrarse en los alimentos cuando se calientan en exceso.
El riesgo es en gran medida hipotético y, hasta la fecha, no hay evidencia sólida de tal daño.
Aun así, por razones de seguridad, solo debe utilizar recipientes marcados como “aptos para microondas” para cocinar o calentar alimentos en el microondas.
Un carcinógeno
Un carcinógeno es cualquier sustancia que tenga el potencial de causar cáncer.
Puede estar presente de forma natural en el medio ambiente (como ciertos virus y los rayos ultravioleta del sol) o ser creado por los seres humanos (como el humo del cigarrillo o los desechos industriales).
Los carcinógenos pueden afectar el ADN de una célula, provocando que mute y se multiplique de forma anormal.
Cualquier método de calentamiento puede cambiar el contenido de nutrientes de un alimento.
Cuando se trata de combatir el cáncer, la preocupación está relacionada en gran medida con la forma en que la cocción afecta a las sustancias de los alimentos conocidas como antioxidantes.
Los antioxidantes neutralizan las moléculas llamadas radicales libres que dañan el ADN de las células, provocando que muten y posiblemente se conviertan en cáncer.
Riesgos de cocinar en microondas
Lesiones por radiación
Si bien es poco frecuente, se han documentado algunos casos de quemaduras por radiación debido a la reparación inadecuada de hornos microondas.
En esos casos, cantidades excesivas de radiación de microondas se filtraron a través de sellos del horno mal colocados o faltantes.
Nunca se debe utilizar un horno microondas si el sello de la puerta está roto o si la luz o el plato giratorio permanecen encendidos después de abrir la puerta.
Calentamiento irregular o desigual
Uno de los problemas más comunes de la cocción en microondas es el calentamiento irregular o desparejo.
Las microondas penetran los alimentos hasta una profundidad de aproximadamente una pulgada.
Por este motivo, los alimentos pueden estar calientes por fuera y fríos o congelados por dentro.
Se pueden producir quemaduras si una persona se lleva a la boca alimentos que cree que están a una temperatura pero que resultan estar a otra.
Por eso, los biberones nunca deben calentarse en microondas.
Explosión de líquidos
Normalmente, se puede determinar si un líquido está caliente en función de si está hirviendo. En el microondas, el agua puede sobrecalentarse sin llegar a hervir.
Sacar líquido sobrecalentado de un microondas es peligroso porque a veces puede explotar y provocar quemaduras graves.
Lo mismo puede ocurrir con las patatas o los huevos horneados en el microondas.
Para evitar esto, siga los tiempos de cocción recomendados en las etiquetas de los productos alimenticios o utilice los tiempos de cocción preestablecidos en su horno microondas.