Sin lugar a duda Colombia es un destino que tiene mucho para ofrecer a sus visitantes, paisajes espectaculares, una rica cultura, excelente comida e incluso una inmejorable atención en medio de lujos.
Así lo ratificó la revista internacional especializada en turismo de lujo y estilo de vida Condé Nast Traveler, donde se publicó la lista de los mejores hoteles del mundo para 2022.
Y en este importante listado aparece el hotel Sofitel Barú Calablanca Beach Resort, de Colombia. El magazín destacó el edificio principal y lo catalogó como una “obra arquitectónica magnífica”. “Colombia tenía escasez de resorts de lujo frente al mar. Pero ahora, tiene uno excelente”, se lee en el artículo publicado por la revista.
Además, destaca la oferta gastronómica que hay con los tres restaurantes y siete bares que cuenta y las 187 habitaciones que, según la revista, son amplías y con colores neutros.
La esencia de Sofitel Barú Calablanca
Este hotel abrió sus puertas al público a penas a finales del 2021 se suma al conjunto de propiedades exclusivas de Sofitel, la marca de lujo del grupo Accor, que llegó al país en 1995 con la apertura del hotel Sofitel Legend Santa Clara.
El resort está ubicado en las bellas playas de arena blanca de Barú cerca de Cartagena, es el primer destino de playa de lujo del país de la marca, por lo que no es extraño su posición en este ranking.
Una de sus principales atracciones son sus hermosas instalaciones que equilibran la naturaleza con la modernidad. También cuenta con un centro de convenciones con seis salones equipados con tecnología para cualquier reunión o evento social. Además, Sofitel Spa tiene cuatro cabinas, sauna, hammam y un salón de yoga para el bienestar y la relajación.
Acá también se podrá realizar ejercicio y los visitantes disfrutan de una pecera junto a la piscina de casi el doble del tamaño del spa.
Por otra parte, los restaurantes que fueron resaltados por la revista son dirigidos por el chef francés Patrice Guaus. Los platos combinan sabores locales de la cocina tradicional colombiana y mediterránea con técnicas ancestrales e ingredientes selectos.
Como parte de su esencia Sofitel Barú Calablanca Beach Resort trabaja en estrecha colaboración con su comunidad local para ofrecer un programa creativo de experiencias inmersivas que reflejen la identidad y el legado único de Barú, desde talleres de trenzado y sombreros, hasta clases de música y exhibiciones de artistas locales.
La biodiversidad como protagonista
Todo esto se complementa con los más de 8.000 metros cuadrados de playa a lo largo del litoral colombiano, que hace parte de la isla de Barú un tesoro con un sinfín de combinaciones paisajísticas.
Particularmente gracias a su inmensa biodiversidad con más de 60 especies de corales, 153 especies de crustáceos, 244 especies de moluscos, 513 especies de peces, además de aves migratorias que adornan a plenitud este paraíso con la mar azul turquesa y que se puede admirar en toda su plenitud desde cualquier lugar del hotel.
Este complejo hotelero que tiene un área de 19.750 metros cuadrados construidos logra equilibrar el diseño arquitectónico y la naturaleza, apostando a la sostenibilidad ambiental.
De acuerdo con sus directivos, es el primer y único hotel en Barú y en el Caribe colombiano en tener la certificación LEED, la más reconocida a nivel mundial para construcciones sostenibles. Este respaldo demuestra el compromiso del hotel por lograr una operación amigable y sostenible con el medio ambiente.
¿Cuánto cuesta una noche en el mejor hotel de Colombia?
La noche en la habitación más sencilla con la que cuenta el hospedaje puede llegar a costar 400 dólares por cada adulto, según la página web del resort.
El precio aumenta si se elige un cuarto más lujoso. La Suite Familiar Calablanca, una de las más costosas, tiene un valor de 819 dólares la noche por persona. Esas tarifas no incluyen ni el desayuno ni las otras comidas.
Otros hoteles sudamericanos en el ranking
Además de este espectacular hotel a orillas de la playa en Colombia, hay otros hoteles sudamericanos en el listado publicado en la edición N° 26 de Condé Nast Travele.
Explora Chaltén, Argentina
Explora, es un lodge especializado en excursiones de aventura hace que la Patagonia sea accesible en más de un sentido, desde la base de El Chaltén, el pueblo resort lleno de energía y vitalidad en el extremo norte del parque nacional Los Glaciares de Argentina.
Posada Ayana, Uruguay
Su atracción principal es Ta Khut, el último observatorio diseñado por el artista estadounidense James Turrell y la primera de sus obras en Uruguay. Tras dos años de construcción, la sorprendente pirámide de mármol blanco que sobresale entre las dunas ha aumentado de forma significativa la cultura de bar de esta zona.
Hacienda Altagracia, Costa Rica
El compromiso de Hacienda AltaGracia con el bienestar se aprecia desde el aterrizaje en su pista privada. Una buena forma de empezar es con un café de la plantación propia antes de entrar en una de las cincuenta casitas, varias de las cuales tienen piscina.
Rosewood Sao Paulo, Brasil
El primer centro Rosewood de Suramérica ya se ha convertido en uno de los puntos neurálgicos de la ciudad: el restaurante y el bar del lobby están llenos cada noche. Y no es de extrañar: aunque el hotel es diferente a cualquier otro alojamiento de la ciudad, tiene algo que es puro Sao Paulo. Tal vez se deba a las obras de arte que pueden encontrarse en cada rincón, desde el fondo ilustrado de la piscina en la azotea a las fundas de cojín personalizadas de cada habitación.
Villa Bokéh, Guatemala
Ubicada en las afueras del casco histórico de Antigua, este elegante hotel boutique de 15 habitaciones ofrece unas vistas de postal del volcán de Agua, uno de los tres que rodean la ciudad colonial guatemalteca. La propiedad forma parte del grupo Relais & Chateaux, y se nota su influencia en el servicio personalizado y atento, una de sus características estrella.
*Foto de portada tomada de la página Oficial del resort all.accor.com