Las temperaturas ya comienzan a bajar y el invierno está cada vez cerca. Si crees que ha empezado a hacer frío, imagínate vivir en un lugar donde el clima haga que experimentes una verdadera aventura gélida.
Desde ciudades donde las temperaturas descienden bajo cero en invierno, hasta aquellas en las que el frío es constante, prepara la ropa térmica, los guantes, orejeras y todos los accesorios que se te ocurran porque te dejaremos congelado con el top 10 de las ciudades más frías del mundo.
10. Nuuk, Groenlandia
Esta ciudad es la capital de Groenlandia. Tiene poco más de 16 mil habitantes y es una de las capitales menos pobladas del mundo. Los inviernos de esta ciudad suelen ser largos, fríos y nevados.
La temperatura promedio de este lugar es de -1,3 grados. El mes de enero es el más frío, con temperaturas de -7,9 grados. La temperatura mínima más violenta que se ha registrado en esta zona es de 50,8 grados bajo cero.
Pero nada de esto es impedimento para pasar un buen tiempo. Nukk te presenta unos fantásticos paisajes de hielo y actividades para entretenerte.
Puedes dar un paseo en helicóptero por el vasto hielo de Groenlandia, visitar ruinas nórdicas o realizar un safari en barco para ver a las ballenas divertirse alrededor de la costa.
El Museo Nacional, situado en casco antiguo de Nuuk y muy cerca del fiordo, es el lugar para aprender más acerca del pasado congelado de Groenlandia y su fascinante presente.
9. Tallin, Estonia
La temporada fría dura 3,9 meses, del 24 de noviembre al 19 de marzo, y la temperatura máxima promedio diaria es menos de 3 °C. El mes más frío del año en Tallin es febrero, con una temperatura mínima promedio de -7 °C y máxima de -2 °C.
Tallin da la bienvenida a los turistas invernales con su antigua ciudad medieval convertida en una mágica maravilla blanca en esta época del año.
Agarra tus patines y deslízate por la pista de hielo al aire libre, y cuando tengas frío podrás superarlo con un vino caliente con especias en uno de los acogedores cafés de otra de las ciudades más frías de Europa.
8. Minsk, Bielorrusia
La temporada fría dura 3,9 meses, del 17 de noviembre al 12 de marzo, y la temperatura máxima promedio diaria es menos de 3 °C. El mes más frío del año en Minsk es enero, con una temperatura mínima promedio de -10 °C y máxima de -2 °C.
Reconocida por su gente amigable, sus calles siempre limpias y sus frondosos parques. Uno de beneficios de Minsk es la falta de turistas abarrotando las calles, pero hay mucha oferta cultural para los turistas que lo buscan.
El circo de Minsk bien merece una visita, especialmente para los niños. Los adultos pueden comprar una entrada para la ópera o el ballet a un precio mucho menor que en la mayoría de las ciudades en Europa. A los bielorrusos les encanta bailar, así que asegúrate de visitar una discoteca o dos y ponerte tus zapatos.
7. Varsovia, Polonia
La temporada fría dura 3,7 meses, del 19 de noviembre al 10 de marzo, y la temperatura máxima promedio diaria es menos de 5 °C. El mes más frío del año en Varsovia es enero, con una temperatura mínima puede ser de -17 °C y máxima de 1 °C.
Es uno de los lugares favoritos para los amantes de la cultura en Europa. Varsovia tiene casi todo a mitad de precio, en comparación con otras ciudades europeas.
Elogiada por su tamaño compacto, Varsovia tiene una excelente selección de museos, galerías y lugares Patrimonio de la Humanidad. Entre ellos, la Plaza del Mercado y la del Castillo y, como curiosidad, el Palacio de la Cultura y las Ciencias, el edificio más alto de Polonia y un imponente ejemplo de arquitectura estalinista.
6. Helsinki, Finlandia
En invierno, la temperatura puede bajar a -30 °C; en enero de 1987 incluso bajó a -36 °C. En un año hay 130 días con temperaturas bajo cero. En general, la nieve cubre el suelo del 10 de diciembre al 10 de abril, con un máximo de 20/25 cm desde finales de febrero hasta mediados de marzo.
La fresca capital de Finlandia está rodeada de mar y de un vasto archipiélago, creando una ciudad que combina la nórdica elegancia urbana con una impresionante belleza natural.
El Báltico se congela durante el invierno, de tal manera que incluso se puede patinar sobre él. Si prefieres la nieve al hielo, puede alquilar unos esquís y aprovechar las pistas del Parque Central de una de las ciudades más frías de Europa.
Si buscas una experiencia invernal extrema y diferente, acércate a nadar en rastila. Además, la Laponia Finlandesa es uno de los mejores destinos para ver auroras boreales.
5. Yellowknife, Canadá
Es la ciudad canadiense más poblada de los Territorios del Norte aunque solo tenga 23.000 habitantes que viven también en un clima de invierno muy extremo con temperaturas medias por debajo de los -10ºC entre noviembre y marzo y que en enero y febrero muchos años llegan a mínimas de -50ºC.
Al igual que Yakutsk la minería (oro y diamantes) es la que impulsó el nacimiento de esta ciudad situada a la orilla del Lago del Esclavo donde más de la mitad de la población es nativa americana.
Puedes visitar El Centro del Patrimonio del Príncipe de Gales, el Parque Territorial Hidden Lake o dar un paseo en bote por Great Slave Lake.
Si lo que quieres es ver una maravilla de la naturaleza podrías disfrutar de la Aurora Boreal, o que aparece como baile, con patrones brillantes en los cielos sobre Yellowknife.
Pero ver la aurora es un pasatiempo frío, mucho más cómodo gracias a los paseos en trineo tirados por perros, áreas de observación con calefacción, ropa apta para el Ártico y bebidas calientes en Aurora Village.
4. Yakutsk, Rusia
Situada a tan sólo 450 kilómetros del círculo polar ártico, en una zona con importantes minas de diamantes, los habitantes de esta ciudad rusa deben sobrevivir uno de los inviernos más fríos de la Tierra.
La capital de la región de Saja, junto al río Lena, tiene 6 meses al año (otoño e invierno) con temperaturas medias por debajo de los -10ºC, que llegan a mínimas de hasta -60ºC entre diciembre y enero, lo que dificulta enormemente incluso poder desplazarse.
Puedes visitar el milagro de la naturaleza: los Pilares del Lena, pasear en un trineo de perros o asistir a la feria de pescado y… pescar
3. Ottawa, Canadá
La capital de Canadá tiene registrada la segunda temperatura mínima más baja de todas las capitales del mundo, solo superada precisamente por Ulan Bator, aunque su temperatura media también está compitiendo con Astaná.
Los -30ºC son normales en invierno. A su vez la mayor desventaja para los visitantes, no para los canadienses que saben sacar el máximo provecho al frío, son los más de 235 centímetros de nieve que caen de media todos los inviernos y que muchos años perduran hasta el mes de abril.
Si puedes, disfruta en el Scotiabank Place, campo de los Ottawa Senator: el equipo de ‘hockey’ sobre hielo de Ottawa. Aunque si lo que prefieres es patinar, te recomendamos que lo hagas sobre el Canal Rideau, el primer lugar Patrimonio de la Humanidad de Ontario, que serpentea a través de la ciudad y es la pista más grande de patinaje del mundo en invierno, congelada de manera natural.
¡Ah! Por supuesto que no querrás perderte el café con jarabe de arce que es una bebida alcohólica caliente muy popular.
2. Astaná, Kazajistán
La capital de Kazajistán no está cerca del Círculo Polar Ártico pero sufre un clima continental extremo debido a su situación geográfica en el interior de Asia, sin que le influya el mar ni los frentes oceánicos que atemperan el clima.
Así, mientras que en algunos meses de junio y julio se superan ocasionalmente los 40ºC de temperatura máxima lo que si se repite es la temperatura extremadamente fría en invierno, con mínimas por debajo de los -50ºC.
La torre de observación de Bayterek, de 105 metros de altura es parada obligatoria, y se dice que encarna la historia popular sobre un árbol de la vida, un ave mágica de la felicidad y un huevo.
Es famosa por su arquitectura futurista así que tampoco puedes perderte un recorrido por el Palacio de la Paz, el Palacio Presidencial Ak Orda o la mezquita de Nur-Astana que es un símbolo de la ciudad.
1. Ulán Bator, Mongolia
La capital de Mongolia, situada a orillas del río Tuul, es otra de las ciudades más frías del mundo. está rodeada por cuatro montañas sagradas con densos pinares en las laderas norte y herbosas estepas al sur.
No solo son las temperaturas mínimas, que también rozan los -50ºC en los meses más fríos del invierno, sino que incluso las máximas, de noviembre a marzo no superan de media los 0ºC. ¡Incluso en julio y agosto se han registrado heladas!
El té de la leche, al que los mongoles ponen un poco de sal, es la manera tradicional de conservar el calor. Viajar a Mongolia en invierno no es la mejor opción, pero si lo haces, hazte con ropa fabricada con pelo de camello.