España es uno de los principales destinos turísticos del mundo y está acostumbrada a recibir cada año a millones de visitantes de todo el mundo.
La historia, la cultura, la gente y, por supuesto, el increíble clima mediterráneo son algunos de sus atractivos. Sin dudad, comer tapas gratis en Granada, ver un espectáculo de flamenco y una corrida de toros, enamorarse de la arquitectura de Antoni Gaudí son algunas de las actividades que deben estar en tu lista de deseos si España es el destino de tu próximo viaje.
Sin embargo, aunque el país es experto en turismo, existen algunas diferencias culturales clave que vale la pena recordar antes de ir, especialmente para evitar momentos incómodos. Por eso en Q’ Pasa te contamos las cosas que no puedes hacer en España.
Vestirte con ropa fuera de temporada
A los españoles les encantan las reglas estacionales en lo que respecta a la ropa, por lo que incluso si todavía se siente bastante cálido en octubre, no encontrará muchos españoles que usen pantalones cortos. Del mismo modo, los españoles se abrigan adecuadamente en invierno, así que no salgas en mangas cortas si quieres pasar desapercibido.
Pasar el salero de mano a mano
Los españoles son muy supersticiosos y se toman en serio sus presagios y tradiciones. Creen que pasarse el salero de mano en mano traería mala suerte. Puede parecerle una tontería, pero cuando es un invitado, debe respetar la cultura y la tradición de su anfitrión. Así que cuando visites España, asegúrate de no poner el salero en la mano de alguien mientras cenas; solo ponlo sobre la mesa para que la otra persona lo recoja.
Esperar a comer temprano
Muchos restaurantes en España no abren sus puertas hasta las 8:30 p. m., por lo que es realmente lo más temprano que debes planear cenar si quieres mezclarte con los lugareños. Comer después de las 9 de la noche significará que los lugares están más concurridos, con mucho más ambiente.
Por su parte, el almuerzo se sirve entre la 1 y las 3 de la tarde.
Y si hablamos del desayuno, los españoles desayunan ligero, normalmente sólo un café y una tostada de pan con tomate y aceite de oliva, o un croissant. No esperes un desayuno inglés completo o panqueques, a menos que vayas a un lugar que se especialice en comida internacional.
Criticar la costumbre de las bebidas alcohólicas
Los españoles disfrutan de una copa a todas horas del día, y es muy común ver adultos mayores apuntalando su bar de barrio con una caña (cerveza) antes del mediodía. Sin embargo, un punto clave para recordar es que los españoles rara vez se emborrachan, porque beben con moderación y, por lo general, con la comida. Así que no olvides pedir unas tapas para acompañar esa ronda de cervezas.
Dirigirte directamente a una mesa cada vez que ingreses a un local
Sentarse en la barra siempre es una buena idea en España, ya que este es, con mucho, el lugar más animado del salón. Además, esto te brindará la oportunidad de socializar con el personal y los demás clientes, hacer amigos y aprender cosas que no sueles encontrar en las guías turísticas.
Beber tu chocolate caliente
El chocolate caliente español suele ser muy espeso y cremoso, más parecido a un budín que a una bebida adecuada. Haz como los lugareños y sírvelo con deliciosos churros crujientes.
Llamar español a un catalán
Ciertamente no querrás enojar a más de 7 millones de personas que están tan orgullosas de su idioma, cultura e historia, y que actualmente luchan por su independencia. Nada los ofenderá más.
Mostrar tus pertenencias
Los carteristas intentan estafar a los turistas en España, como en cualquier otro lugar, y buscan a los que cometen errores tontos, como manipular un mapa o caminar con una bolsa entreabierta. Asegúrese de consultar mapas en bares o restaurantes antes de salir de ellos, cuando sea posible, y mantenga sus pertenencias seguras en una bolsa con cremallera, que se usa cerca del cuerpo.