Vidas perfectas, parejas perfectas, viajes perfectos, sonrisas perfectas, pieles perfectas, cuerpos perfectos… Parecería que en los últimos años la clave de la felicidad está precisamente en la ‘perfección’, o por lo menos en lo que nos han hecho creer que es ‘perfecto’.
Y ciertamente como lo dicen los expertos en psicología y sociología esta ‘creencia letal’ se ha visto extendida por las redes sociales y lo que generalmente se muestra en ellas.
No es raro en este sentido que nos encontremos frente a una generación que hace todo por llenar ‘estereotipos’, incluso a un gran costo, emocional, psicológico y por supuesto económico.
Y ¿A quién nos referimos exactamente? Al grupo de edad que corresponde a los famosos ‘millennials’ o generación ‘Y’. A quienes al parecer No les gustan sus pechos, sus glúteos, sus narices, ni sus orejas, por eso han hecho del bótox y las cirugías todo un movimiento.
¿Por qué los “millennials” tienden a utilizar más que nunca bótox y cirugías?
Con este panorama, se ha observado un destacado aumento en la demanda de estos procedimientos en el grupo de edad entre 19 y 34 años. Un incremento de hasta el 87%, de acuerdo con la American Society for Aesthetic Plastic Surgery .
Adicionalmente, mientras que 2018 se erigía, por excelencia, como el año del body positive, se convertía al mismo tiempo en el que los millennials eligieron para liderar y allanar el camino hacia la normalización de la cirugía plástica.
Las pruebas son claras: si la popularidad del bótox como tratamiento no quirúrgico ha aumentado en un 87% entre el público millennial en los últimos ocho años, los retoques estéticos que sí implican cirugía han crecido hasta el 43% en esta generación. Y todo apunta a que esto se debe a varios factores que han propiciado este acrecentamiento.
Es la generación más ‘interconectada’
Es la generación del ‘selfie’, la generación de las redes sociales, de los ‘likes’, la que encuentra la gratificación en los ‘followers’ o midiendo el impacto que producen los archivos que comparten, habitualmente fotos o vídeos que hacen referencia a su propia vida y su aspecto físico.
Es la generación que se fotografía constantemente, se ve de forma continuada en la pantalla de su móvil, ordenador, redes sociales… Tendencia que fomenta que los ‘millennials’ tengan entre sus máximas preocupaciones su apariencia hacia el mundo exterior.
O si quieren buscar responsables directos como dicen algunos expertos, que la culpa es de las Kardashian (su propio cirujano calificó su imagen como ‘dañina’ para las nuevas generaciones) y de Instagram… O, lo que es lo mismo, de la presión que las redes sociales ejercen sobre el físico de los jóvenes de estas edades.
“A menudo no pueden mostrarte lo que quieren cambiar frente al espejo. Necesitan sacar sus teléfonos y enseñar una foto. Este hecho es preocupante e indica que, en muchos casos, pueden estar buscando una cirugía por los motivos equivocados”. Contó el doctor Patrick Byrne, director de cirugía plástica facial y reconstructiva de la John Hopkins Medicine.
Los procedimientos son cada vez más aceptados
La cirugía plástica y procedimientos de cirugía estética están cada vez más aceptados socialmente. Y más cuando la máxima de la cirugía plástica y estética es la consecución de un resultado natural y armónico, acorde con la fisionomía del paciente.
Hoy, el uso de la cirugía plástica y estética es considerado como un medio más para contribuir al bienestar personal y mejorar la propia apariencia, o el llamado ‘amor propio’, y cada vez es menos frecuente que los pacientes oculten a sus allegados que se han sometido a procedimientos estéticos, como ocurría hace algunos años.
Es decir que el estigma social respecto a someterse a este tipo de operaciones, continúa diluyéndose: la cirugía plástica ya no es solo para los más excéntricos, ricos o vanidosos.
Se conoce mejor los ‘beneficios del bótox’
Cada vez se conoce mejor el mecanismo de acción del bótox, y se sabe que además de tratar y mejorar arrugas ya establecidas, puede ayudar a prevenirlas. Este grupo de jóvenes, en su mayoría lo utilizan como prevención de la aparición de arrugas.
Clásicamente el bótox era demandado por grupos de edad más avanzada, cuyo objetivo era corregir los efectos del envejecimiento y las arrugas ya establecidas.
Hay más ‘exigencia social’
La preocupación por el aspecto físico en la cada vez más exigente en la sociedad actual, que también de manera exponencial ha venido incluyendo a los hombres. Incluso se estima que la población masculina que demanda tratamientos de cirugía estética se sitúa en torno al 10 – 15%, y continúa en aumento.
Es así como cada vez se valora más el aspecto físico en circunstancias como seguir siendo competitivo en el ámbito laboral.
Otra razón por la que ha añadido un pequeño porcentaje al total es la importancia cada vez mayor del autocuidado: el creciente interés por la salud y el cuidado de uno mismo.
Tratamientos preventivos
Si hay una cosa que se debe tener clara en esta ‘tendencia’ como lo mencionamos antes, los millennials no solo buscan cirugías, sino también tratamientos preventivos. Por eso recurren a rellenos dérmicos, también usan el bótox de forma preventiva.
Estos los ayudarán a verse mejor en los selfies sin tener que pasar por un quirófano. Buscan seguir viéndose jóvenes y verse lo más natural posible.
Así las cosas, este grupo de personas no esperan tener las arrugas marcadas para usar bótox o rellenos, sino que los usan entre los 20 y 30 años.
Y es muy importante saber que no todos buscan lo mismo. Mientras están los que prefieren la prevención, otros quieren labios grandes, pómulos marcados y hasta hoyuelos.
En este grupo se encuentra el baby bótox y el peeling que son los tratamientos más buscados por mujeres de esta edad, dado que disminuyen las marcas de envejecimiento.
El baby bótox retrasa la aparición de las líneas de expresión y arrugas. Este procedimiento consiste sencillamente en la inyección de microdosis de botox, es decir, se utiliza mucha menos cantidad de la que se usa habitualmente en los tratamientos con toxina botulínica tipo A, previniendo en edades más tempranas la formación de arrugas en el rostro.
Con esto se busca mejorar arrugas dinámicas y gesticulación, también se suma la aplicación de ácido hialurónico en labios para aumentar volumen.
También se busca marcar la mandíbula en hombres y en las mujeres definir la cara para hacerla ver más joven.
La segunda opción, el peeling consiste en una exfoliación profunda que estimula la renovación celular manteniendo la piel más luminosa, homogénea y firme por más tiempo.
Las cirugías plásticas más demandadas por los millennials
Prótesis de mama
En la actualidad, la demanda de cirugía mamaria supone casi el 50% de todas las intervenciones estéticas practicada. Correspondiendo la mayor parte de ese porcentaje a una demanda de aumento.
Para esta cirugía se realiza un estudio preoperatorio y una ecografía mamaria. Se aplica anestesia general y se pueden abordar mediante dos incisiones: por el surco submamario o alrededor de la areola.
Asimismo, la prótesis puede colocarse de diferentes formas: por detrás de la glándula mamaria, por encima o por debajo del músculo pectoral, eso siempre estará bajo recomendación médica.
Liposucción
La liposucción es la solución idónea para aquellas personas que presentan zonas con grasa localizada que no pueden eliminar de otra manera (ni con dieta, ni con deporte, etc). Los glúteos y las caderas son las áreas más intervenidas por los millennials.
A pesar de ser una cirugía mínimamente invasiva si no realiza de la forma adecuada puede tener serias consecuencias.
Rinoplastia
Es otra de las cirugías más demandadas por la Generación, en ella, se modifica la forma de la nariz.
Con la rinoplastia se puede disminuir o aumentar el tamaño, cambiar la forma de la punta o del dorso, estrechar los orificios nasales o modificar el ángulo entre la nariz y el labio superior.
También se recurre a esta intervención para corregir los problemas congénitos, traumatismos y algunas dificultades respiratorias. La rinoplastia se realiza siempre en quirófano y bajo anestesia general.
Otoplastia
Es la cirugía realizada para reposicionar las orejas de «soplillo» a una posición más normal, más pegadas a la cabeza, o para reducir el tamaño de las orejas grandes. También es una de las intervenciones de cirugía estética más demandadas por millennials.
Otras de las cirugías populares corresponden al estiramiento facial, de cejas, cuello y la blefaroplastia, la cual se distingue por rejuvenecer el rostro mediante procedimientos para reparar los párpados caídos y eliminar el exceso de piel.