La vida en Portugal tiene muchos beneficios, como un clima fantástico, una gran belleza natural y un costo de vida asequible. Y para si esto no es suficiente le podemos agregar que Portugal es uno de los países más seguros del mundo.
Todas estas características han hecho que sea cada vez más un destino popular para emigrar, además porque acceder a la ciudadanía es mucho más fácil que en otros países y por si fuera poco, permite que conserves la de tu país de origen.
Dicho esto, es necesario aclarar que hay diferentes formas de conseguir la ciudadanía en Portugal desde Latinoamérica.
Cómo obtener la ciudadanía portuguesa
- Ciudadanía por naturalización
- Ciudadanía por matrimonio o unión legal
- Ciudadanía por descendencia (padres o abuelos)
- Ciudadanía a través de las antiguas colonias de Portugal
- Ciudadanía por herencia judía sefardí
- Ciudadanía por nacimiento
- Ciudadanía por adopción (solo menores de 18 años)
Ciudadanía por naturalización
Cronología: cinco años
Obtener la ciudadanía por naturalización generalmente implica vivir en el país durante un período de tiempo lo suficientemente largo como para que se le otorguen los derechos de ciudadanía.
En Portugal, debe residir legalmente durante cinco años antes de poder presentar una solicitud de ciudadanía portuguesa por naturalización. También es posible solicitar la residencia permanente de Portugal después del mismo período de tiempo.
Requisitos básicos para la ciudadanía portuguesa por naturalización:
- Cinco años de residencia legal en Portugal
- Antecedentes penales limpios
- Sin impuestos pendientes adeudados en Portugal
- Conocimiento de portugués a nivel A2
- Prueba de integración en la comunidad
Obtener la residencia: Paso 1 para la ciudadanía portuguesa
La adquisición de la residencia legal en Portugal es el núcleo del proceso de ciudadanía por naturalización. Portugal ofrece varias formas diferentes de obtener la residencia, cada una de las cuales tiene diferentes criterios. Echemos un vistazo a ellos uno por uno. El proceso de residencia generalmente comienza con la solicitud de una visa.
La ruta de la Golden Visa
El programa Golden Visa de Portugal es el mejor camino hacia la ciudadanía. En este popular programa, Portugal ofrece la residencia a cambio de realizar una inversión sustancial en el país. Después de cinco años, esta residencia puede convertirse en ciudadanía portuguesa, sujeto al cumplimiento de los criterios regulares.
Lo mejor de la ruta Golden Visa en comparación con otras rutas es su flexibilidad. No necesita mudarse a Portugal en absoluto (a menos que lo desee). Simplemente necesita pasar siete días en Portugal en el primer año, y 14 días en total cada dos años hasta llegar al punto de cinco años.
La Golden Visa ofrece una serie de diferentes opciones de inversión, muchas de las cuales pueden generarle un ingreso decente mientras acumula los años hacia la ciudadanía.
Esta ruta es la más sencilla si planea vivir en Portugal, aunque también es posible alquilar su propiedad Golden Visa. El umbral de inversión mínimo estándar para la ruta inmobiliaria Golden Visa es de 500.000 €.
Hay varios umbrales más bajos disponibles en bienes raíces. Si opta por invertir en una vivienda en rehabilitación (que tenga más de 30 años y se encuentre en una zona de rehabilitación), el umbral mínimo se reduce a 350.000 €.
En áreas de baja densidad, el umbral estándar se reduce a 400.000 €, con 280.000 € para la opción de rehabilitación.
Los bienes raíces no son la única opción de Golden Visa. También puede comenzar su viaje hacia la ciudadanía portuguesa con varios otros tipos de inversión, como:
- 500.000 € invertidos en capital riesgo portugués o fondos de inversión de capital privado
- 1,5 millones de euros de transferencia de capital a un banco portugués
- Establecer una empresa portuguesa y crear al menos 10 puestos de trabajo (o cinco puestos de trabajo en un área de baja densidad)
- 350.000€ de inversión en proyectos de investigación científica
- 250.000 € de inversión en patrimonio nacional o proyectos artísticos/culturales (en la práctica, esta ruta se utiliza muy poco y puede llevar mucho tiempo encontrar un proyecto adecuado)
La ruta de la visa D7 (ingresos pasivos)
Para aquellos que no deseen realizar una inversión significativa en Portugal, la visa D7 es una excelente opción para obtener la residencia y comenzar su viaje hacia la ciudadanía.
La visa D7 de “ingresos pasivos” fue diseñada originalmente para jubilados extranjeros que cobran sus pensiones fuera de Portugal. Pero ahora, abarca a cualquier persona con ingresos suficientes de una fuente extranjera, que pueden incluir dividendos, ingresos por alquileres, regalías o salarios de un empleo remoto.
El umbral de ingresos mínimos para el D7 es uno de los más bajos disponibles en Europa. Portugal pide un mínimo de 740 € al mes, que es el salario mínimo nacional portugués.
La ruta de la visa D2 (Empresario)
Si no tiene ingresos pasivos, pero desea iniciar un negocio en Portugal, es posible que desee consultar la visa de empresario D2. Los requisitos son un poco más complicados en comparación con el D7, pero es una buena opción para aquellos con una idea de negocio sólida.
La ruta de la visa HQA
Portugal ha introducido recientemente una nueva ruta de residencia conocida como visa HQA (HQA significa «actividad altamente calificada»). La visa HQA ha sido descrita como un punto medio entre la Golden Visa y la visa D7.
La ley portuguesa establece que todas las solicitudes de Visa HQA deben decidirse dentro de los 30 días, por lo que la línea de tiempo es mucho más rápida que la Golden Visa o la D7. Además, puede mantener su estado de residencia sin requisitos de estadía física.