Nayib Bukele está a portas de terminar su período presidencial en El Salvador, y mientras prepara su candidatura para su reelección aunque está prohibido en el país, en el resto de políticas latinoamericanas analizan su modelo de Gobierno y el éxito que ha tenido en el país centroamericano que ha tenido un efecto significativo en el resto de la región.
La política de Nayib Bukele y el modelo de Gobierno del presidente de El Salvador, para muchos ciudadanos se ha convertido en un ejemplo a seguir como la única solución efectiva para erradicar las múltiples problemáticas que comparten los países tercermundistas y en desarrollo de Latinoamérica.
El modelo de Gobierno de Nayib Bukele en El Salvador
Aunque Nayib Bukele es un presidente con una popularidad dividida entre amores y odios, entre los detractores y quienes apoyan su Gobierno, la realidad es que aunque para muchos su política esté llena de autoritarismo e incluso pueda demostrar señales de convertirse en una posible dictadura.
La realidad es que desde la llegada del líder de izquierda al país centroamericano, los índices de criminalidad en El Salvador disminuyeron considerablemente alcanzando cifras históricas nunca antes vistas.
De acuerdo con las últimas estadísticas entregadas por la organización Insight Crime, la tasa de homicidios de El Salvador redujo hasta ubicarse en 7,8 asesinatos por cada 100.000 habitantes, lo que corresponde a los niveles más bajos de las últimas dos décadas de registros en el país centroamericano.
Además durante el primer trimestre de este año 2023, el Gobierno de Nayib Bukele logró encarcelar a más de 65.000 pandilleros, lo que significó un golpe contundente para la criminalidad en las calles, especialmente para las maras salvatruchas que durante años han azotado al país centroamericano.
El impacto del Modelo Bukele en Latinoamérica
Es por eso, que las cifras cada vez llaman más la atención entre políticos y ciudadanos de otros países de la región de Latinoamérica, quienes parecen empatizar ahora más con el modelo autoritario de Bukele que con democracias y estados de derecho.
Ya que ven en el sistema de Gobierno implementado por Nayib Bukele en El Salvador, la respuesta a los mismos problemas en materia de seguridad y políticas públicas que enfrentan en su territorio, lo que hace ver el modelo Bukele como una posible solución en otros países.
De hecho el impacto del “modelo Bukele” en otros políticos de la región de Latinoamérica, ha sido tal, que tras el escrutinio de las elecciones presidenciales de la primera vuelta en Argentina, Javier Milei, el candidato que lleva la delantera para quedarse con la presidencia del país suramericano, aseguró que uno de los miembros de su gabinete político había viajado hasta El Salvador para estudiar de cerca el modelo de Gobierno de Nayib Bukele y la manera en la que su éxito en el país centroamericano también podría ser aplicado en Argentina.
Sin embargo y aunque en El Salvador ha sido indiscutiblemente un caso de éxito, la realidad es qué el modelo de Gobierno de Nayib Bukele también ha tenido varios detractores quienes critican especialmente la violación de Derechos Humanos de los pandilleros en las cárceles.
Por lo que diferentes comunidades internacionales y otros políticos de la región como Gustavo Petro, el presidente de Colombia han denunciado las políticas carcelarias de Bukele, que incluso aseguran está creando una crisis de hacinamiento en los centros penitenciarios.
¿Qué piensan los expertos de implementar el “Modelo Bukele” en otros países de Latinoamérica?
Para los expertos el modelo de Gobierno de Nayib Bukele y el impacto que ha tenido no solamente en El Salvador sino que también en el resto de países latinoamericanos, puede representar un riesgo para las democracias de los otros países de la región, por el sistema de autoritarismo de este tipo de Gobierno.
Además de convertirse en un escenario completamente utópico, ya que por más de qué este tipo de problemáticas sean un común denominador en la región de Latinoamérica, la realidad es que cada país tiene un sistema de Gobierno completamente diferente y establecido de varios años atrás, por lo que sería muy difícil adaptarse a cambios tan drásticos con una modificación de políticas públicas y en materia de seguridad, inspiradas en el modelo Bukele.
