Desde el origen mismo de la humanidad, la muerte ha sido un gran misterio, estudiada desde diferentes perspectivas, desde el científico hasta el religioso; y asimismo, se empezó a interesarse en los momentos que anteceden a ese último suspiro.
Entre las tantas hipótesis que hay alrededor del tema, una de las más conocidas es la que dice que sus vidas pasan ante sus ojos, se repiten momentos memorables y pueden experimentar una experiencia extracorporal, sintiendo que se están mirando a sí mismos desde otro lugar en el cuarto para luego ver una especie de luces al final de un túnel.
Ahora, una pequeña investigación que estudió la actividad cerebral de cuatro personas mientras se estaban muriendo muestra un estallido de actividad en sus cerebros después de que sus corazones se detienen.
Así, los autores dicen que el hallazgo, explica cómo el cerebro de una persona puede reproducir recuerdos conscientes incluso después de que el corazón se haya detenido. “Sugiere que estamos identificando un marcador de conciencia lúcida”, dice Sam Parnia, neumólogo del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York que no participó en el estudio.
Sobre el estudio
Los investigadores rastrearon a cuatro personas que estaban muriendo debido a un paro cardíaco cuando les quitaron los ventiladores y descubrieron que dos de ellos tenían una ráfaga de ondas gamma, que son algunas de las ondas cerebrales más rápidas que se pueden experimentar, según Healthline.
Esto sucedió entre 30 segundos y dos minutos después de que se desconectara a los pacientes de los ventiladores.
Los autores del estudio explicaron que estas ondas gamma podrían significar que los pacientes experimentaron alguna forma de conciencia, similar a estar en un estado lúcido. El estudio mostró que dos de las cuatro personas estudiadas notaron un aumento en las ondas gamma, lo que indica actividad cerebral.
Una parte del cerebro que experimentó una alta actividad de ondas gamma fue la unión temporoparietal, detrás de la oreja. Según Live Science, esa área puede activarse particularmente cuando alguien tiene un sueño o una “experiencia fuera del cuerpo”.
Para recopilar esta información, los investigadores de la Universidad de Michigan monitorearon a los pacientes moribundos mediante el monitoreo de electroencefalograma, que son sensores que se adhieren al cuero cabelludo para detectar actividad eléctrica en las ondas cerebrales.
Sin embargo, los investigadores notaron que debido a que los pacientes fallecieron, no está claro exactamente qué experimentaron mientras morían y si esta actividad cerebral incluso se relaciona con la muerte.
Aunque hemos escuchado historias de personas que han tenido una experiencia cercana a la muerte, sus cerebros pueden ser diferentes ya que no terminaron muriendo, informaron los investigadores.
Información primaria
De hecho, aseguran que en los cerebros humanos moribundos ocurre una oleada de actividad que se asemeja a estar despierto, incluso después de que la persona deja de respirar.
“Si hablas sobre el proceso de morir, sabemos muy poco”, dijo Jimo Borjigin, neurocientífico de la Facultad de Medicina de la Universidad de Michigan que dirigió el estudio. “Este es quizás el primer estudio que realmente muestra segundo a segundo cómo muere el cerebro”, dijo, y señaló que no hay muchas personas a las que se les haya estudiado el cerebro mientras estaban en proceso de morir.
“Si bien los mecanismos y la importancia fisiológica de estos hallazgos aún no se han explorado completamente, estos datos demuestran que el cerebro moribundo aún puede estar activo”, según Borjigin, coautor del estudio con el Dr. George Mashour, director fundador de Michigan. Centro de Ciencias de la Conciencia. “También sugieren la necesidad de reevaluar el papel del cerebro durante un paro cardíaco”.