Policías de la ciudad de Nueva York tuvieron un enfrentamiento en un refugio administrado por la ciudad en Queens.
En este agentes habrían golpeado y utilizaron una pistola paralizante contra un migrante venezolano mientras sostenía a su hijo de 1 año.
En videos conocidos en redes sociales, se ve a oficiales del orden en una disputada con personas del refugio.
Esto mientras trataban de sujetar al hombre, Yanny Cordero, de 47 años que se agarraba de la puerta cerrada de un ascensor en el refugio y sostenía a su hijo fuertemente en sus brazos.
En medio del operativo, un agente sacó una pistola paralizante amarilla para replegar a Cordero.
Los agentes continúan sujetando a Cordero después de separarlo de su hijo, inmovilizando su cabeza contra un escritorio mientras intentan tirarlo al suelo.
Un tercer oficial se involucra y golpea según las imágenes a Cordero dos oportunidades en su rostro.
Entre los gritos en el clip se logra escuchar apartes como; “Esto es abuso, hermano. No le pegues. No le pegues. ¿Dónde están los derechos humanos?”.
Atendiendo llamado
La Policía dijo que estaban respondiendo a una llamada sobre una disputa que involucraba a un hombre supuestamente ebrio.
Dijeron que los agentes en el lugar le dijeron al Cordero múltiples advertencias y órdenes para que entregara el niño a otra persona.
Mientras que Cordero asegura que él no habría ingerido bebidas alcohólicas ya que debía trabajar el siguiente día.
Dijo que la disputa comenzó cuando regresó al refugio, en el barrio Jamaica de Queens, con una cena para su familia.
Un empleado del refugio lo golpeó en la cara junto a los ascensores mientras luchaba por comunicarse en inglés, dijo.
Cordero fue acusado de resistirse al arresto, alteración del orden público y comportamiento violento, obstruir la administración del gobierno y actuar de manera perjudicial.
Los reportes de prensa muestran que las autoridades también detuvieron a la pareja sentimental de Cordero Andrea Parra, de 23 años.
Las autoridades lamentan los hechos
Los migrantes informaron que, tras ser detenidos sus tres hijos de 1, 3 y 5 años fueron puesto a disposición de la Administración de Servicios para Niños.
Cordero y Parra fueron liberados el sábado por la noche, casi 24 horas después del altercado.
Posteriormente se reunieron con sus hijos el lunes por la noche. La familia ha sido trasladada a un refugio en Brooklyn.
Desde el ayuntamiento de Nueva York, expresaron que lamentan lo ocurrido en el refugio y que “si bien la Policía debe ser cuidadosa con sus intervenciones la comunidad debe ser disciplinada en estos espacios”.
Agregaron desde la Alcaldía que los niños siempre serán su prioridad al igual que sus ciudadanos, por lo que se han iniciado las investigaciones pertinentes para ejecutar las sanciones a las que haya lugar.
Alcalde defendió a los policías
El Departamento de Policía no ha respondido sobre si creía que los agentes manejaron la situación correctamente y no proporcionó imágenes de las cámaras que llevaban en el cuerpo.
Asimismo, el alcalde Eric Adams, demócrata y expolicía, defendió la conducta de los agentes, diciendo que había discutido el caso con el comisario de policía y había llegado a la conclusión de que los agentes habían actuado apropiadamente.
Dijo que Cordero estaba siendo “violento” y “volátil”, lo que Cordero ha negado.
“Esta persona estaba bajo la influencia del alcohol y sostenía a un niño”, dijo Adams durante una conferencia de prensa.
“Esos oficiales tuvieron que quitarle ese niño para que no estuviera en peligro”.
A medida que el número de inmigrantes alojados en la ciudad se ha disparado, los funcionarios de la ciudad han comenzado a imponer más restricciones a los hoteles, refugios y dormitorios en tiendas de campaña.
La ciudad ha impuesto toques de queda en un puñado de refugios tras quejas de vecinos y varios delitos de alto perfil que involucran a inmigrantes.
El mes pasado, la policía arrestó a un migrante por alteración del orden público en una tienda de campaña gigante en Randall’s Island luego de un enfrentamiento con la policía.