En medio de un alarmante escenario global en dónde se prueban armas y mueren miles de inocentes en los actuales conflictos aumenta la tensión día tras día y el fantasma de una tercera guerra mundial.
La larga paz que existe entre las grandes potencias mundiales desde el fin de la Segunda Guerra Mundial en 1945 podría estar llegando a su final.
Y cada vez está más cerca con enfrentamientos cómo los que hay en este momento en Medio Oriente entre el grupo terrorista Hamas e Israel o como el de Rusia y Ucrania. En ambos EEUU y China tienen intereses.
Lo cierto es que tras este panorama, los expertos en seguridad e historiadores alertan sobre las posibilidades de un nuevo enfrentamiento global a gran escala.
Un escenario en el que sin duda los países miembros del G7 y los del BRICS no podrían evadir.
La guerra de Hamas e Israel
Los ataques inesperados del grupo Hamas contra Israel el pasado 7 de octubre de 2023, en los que miles de civiles israelíes fueron masacrados, han iniciado el conflicto palestino-israelí más sangriento de la historia reciente.
Este enfrentamiento ha dejado al menos 10.000 muertos en la Franja de Gaza y más de 1.400 en Israel.
Las Fuerzas de Defensa de Israel han respondido los ataques con una feroz campaña militar por aire, mar y tierra para derrotar a Hamas, que ha dividido a Gaza en dos y ha causado numerosos daños en Cisjordania.
Asimismo, Israel ha manifestado que ha bombardeado objetivos de milicias respaldadas por Irán en Siria y Líbano.
Estos dos países vecinos han sido usados por estos grupos para arrojar ataques en suelo israelí en apoyo a Hamas.
Esos enfrentamientos han aumentado los temores de que la guerra pueda propagarse por la región, involucrando al conflicto a otros países que tienen una presencia allí, como Rusia o China.
La invasión de Rusia a Ucrania
A muchas millas de distancia de Israel, Rusia y Ucrania mantienen un conflicto que ha causado grandes consecuencias en la economía global.
Además, amenaza con empujar a Occidente a una guerra con el país que tiene el arsenal nuclear más grande del mundo.
Ahora, muchas naciones ven con pánico cómo se desarrolla la primera guerra europea a gran escala en más de 70 años.
De acuerdo con The New York Times, se estima que alrededor de 500.000 combatientes han muerto o han quedado fuera de combate por lesión, incluyendo 300.000 rusos y 200,000 ucranianos.
Las tropas de Putin en un inicio intentaron tomar por asalto Kiev, pero la operación fracasó y derivó en una sangrienta guerra.
Desde el inicio de este enfrentamiento se han vivido grandes momentos de preocupación, de que se involucren a otros países, específicamente a los miembros europeos de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN).
Posible invasión de China a Taiwán
En comparación con los enfrentamientos que existen en el Medio Oriente y Europa, que se encuentran en fases muy activas, las tensiones entre los principales países del este de Asia aún no han desencadenado una guerra.
Aunque es posible que esta situación cambie porque China y Estados Unidos cada día desconfían más el uno del otro.
Sobre todo, cuando se trata del estatus de Taiwán, una isla situada en el Mar de la China Meridional que tiene un gobierno autónomo y que Beijing reclama como un territorio suyo.
Taiwan y China, una historia que perdura
La historia de Taiwán con China es larga y se remonta al menos al siglo XVII, cuando la dinastía Qing la administraba.
Desde entonces ha sido gobernada por diferentes poderes, entre ellos Gran Bretaña y Japón.
A partir de la derrota japonesa en la Segunda Guerra Mundial en 1945, volvió a ser un territorio chino.
Pero luego de una guerra civil que ganó el Partido Comunista Chino de Mao Zedong en 1949, el bando perdedor de los nacionalistas liderados por Chiang Kai-shek se refugió en la isla y fundó allí un Gobierno paralelo.
Desde ese momento, han existido dos Gobiernos diferentes en China, uno en Taipei y otro en Beijing.