El hombre más rico del mundo anunció la presentación de la solicitud a las autoridades estadounidenses para la liberación de pruebas en humanos. Sí, el empresario billonario Elon Musk declaró hace unas semanas que el primer chip de Neuralink será probado en un ser humano dentro de los próximos seis meses.
Neuralink está desarrollando un chip que, implantado en el cerebro, le permite interactuar con un dispositivo electrónico externo. El objetivo de la empresa es permitir que las personas con discapacidad se muevan y se comuniquen.
“Estoy seguro de que dentro de seis meses se probará el primer dispositivo Neuralink en un ser humano, explicó Musk. “Yo podría tener implantado un dispositivo en este momento y ni siquiera lo sabrían”, agregó.
Al final, dijo que “hipotéticamente, él podría ser una de esas muestras de prueba”.
Fundada en 2016, Neuralink ya ha realizado pruebas en animales, la última de las cuales se presentó al público hace más de un año: un mono con un implante cerebral que se volvió capaz de jugar un videojuego de forma totalmente autónoma.
Ahora Neuralink quiere dar el último paso. “Queremos tener mucho cuidado y, sobre todo, estar seguros de que funcionará”, dijo Musk durante un evento organizado para actualizar al público sobre el proyecto, “antes de implantar el chip en el cerebro de un ser humano. Sin embargo, ya le hemos presentado a la Food and Drugs Administration (FDA) (autoridad americana sobre fármacos e investigación médica) toda nuestra documentación”.
Implementación de chip de retardo de Neuralink
El evento donde se dio a conocer la noticia originalmente había sido programado para el 31 de octubre, pero fue pospuesto sin explicación. Neuralink, una empresa con sede en el Área de la Bahía de San Francisco, California, y Austin, Texas, está desarrollando un chip capaz de controlar dispositivos electrónicos complejos para permitir que las personas con parálisis recuperen sus habilidades motoras, pero también para curar enfermedades cerebrales, trastornos degenerativos como Parkinson y Alzheimer. Además de estudiar las posibilidades que ofrece la simbiosis entre el cerebro humano y la inteligencia artificial.
Musk, no obstante, cree que el primer beneficio del implante Neuralink será restaurar la visión. “Incluso en los casos de la gente que no ha podido ver nunca, que nació siendo ciega, pensamos que podemos restaurarles la visión porque el córtex visual sigue allí. Estamos seguros de que podríamos hacerlos ver”, señaló. Los expertos médicos, sin embargo, toman este tipo de aseveraciones con distancia y bastante sana incredulidad.
Sin embargo, el entusiasmo de los inversores sigue estando frenado por la incapacidad mostrada hasta ahora por Neuralink para cumplir con los plazos establecidos. Según el cronograma, las pruebas en humanos deberían haber comenzado a fines de 2022. Y la decepción de Musk había llegado al punto de pensar en una inversión en el competidor Synchron, que obtuvo la luz verde de la FDA en 2021, implantando su primer dispositivo en julio de este año en un paciente en los Estados Unidos, después de la finalización de las pruebas en cuatro personas en Australia.
Ahora, con este evento realizado, Musk le dice al mundo que todavía cree en Neuralink, y que se reanuda la carrera por los chips cerebrales, aprobados directamente por la FDA.