Una vez más la ciencia nos sigue demostrando que el futuro no es en decenas o cientos de años, sino que hoy se están haciendo posibles situaciones imaginadas, y que no sólo pueden cambiar nuestra forma pensar o hacer las cosas, sino que pueden modificar por completo la existencia humana.
Como es el caso del desarrollo de un nuevo útero artificial creado por un equipo de científicos del Instituto de Ingeniería y Tecnología Biomédica de Suzhou, en China, capaz de gestar un embrión sin una madre humana.
Este útero artificial va acompañado además de una ‘niñera robot’, que es realmente una inteligencia artificial que monitoriza constantemente los embriones.
De este modo, un dispositivo óptico que amplía las imágenes de los embriones las envía a la inteligencia artificial, la cual las analiza y clasifica. Vigilando así el correcto crecimiento del feto para tener todo bajo control.
Según el artículo compartido en la plataforma del Journal of Biomedical Engineering, el llamado útero artificial es un sistema de contenedores que proporcionan nutrientes y oxígeno en los embriones.
Lo que hace que su importancia vaya un poco más allá, ya que con esta tecnología se puede detectar cualquier cambio que se produzca en el embrión y ajustar, según su estado, ese suministro de oxígeno o nutrientes.
Pruebas en humanos
De momento, la máquina está siendo probada con ratones. Llevando embriones de los roedores a la fase de feto y finalmente a un embarazo a término en úteros artificiales.
Pero, a pesar de los resultados aún no se ha hecho el estudio con embriones humanos, debido a que las leyes internacionales prohíben la experimentación con ellos más allá de las dos semanas de desarrollo.
Sin embargo, en mayo del año pasado quedó abierta una posibilidad para dar luz verde a este tipo de experimentos. Pues la Sociedad Internacional para la Investigación con Células Madre publicó nuevas directrices que indican que podría ser permisible estudiar embriones humanos vivos más allá de las dos semanas que hasta ahora se permiten.
“Todavía hay muchas incógnitas sin resolver sobre el proceso fisiológico del desarrollo normal de los embriones humanos”, aseguran los investigadores en su artículo.
“El estudio del proceso de desarrollo de los embriones humanos no sólo ayuda a las personas a comprender mejor el origen de la vida y el desarrollo embrionario, sino que también proporciona una base teórica para resolver los principales problemas de salud reproductiva, como los defectos de nacimiento”.
Además, los científicos aseguran que, en el futuro, un útero artificial como éste podría eliminar la necesidad de que las mujeres vivan el embarazo durante nueve meses. Permitiendo que el feto crezca de forma más segura y eficiente, mientras que le evitan a la mujer los malestares y riesgos asociados con la gestación y el parto.
Por otro lado, es una tecnología que, de llevarse a la práctica, evitaría la polémica de los llamados vientres de alquiler. Lo que no significa que no creará otro debate sobre la ética en la reproducción.
