Dada la eficacia de los medicamentos para tratar la disfunción eréctil, como el sildenafilo (Viagra), tadalafilo (Cialis) y vardenafilo (Levitra), las empresas farmacéuticas buscaron un medicamento similar para las mujeres.
El Viagra incluso ha sido probado como un tratamiento de la disfunción sexual en mujeres.
Sin embargo, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) no ha aprobado este uso de Viagra.
Hasta hace poco no existían medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos para tratar los problemas de excitación sexual o deseo sexual en las mujeres.
Hay que decir que, 4 de cada 10 mujeres informan que tienen problemas sexuales.
Un medicamento recetado conocido como flibanserina (Addyi), originalmente desarrollado como antidepresivo, fue aprobado por la FDA como tratamiento de la falta de deseo sexual en mujeres premenopáusicas.
Una píldora diaria, Addyi, puede aumentar el deseo sexual en mujeres con bajo deseo sexual que encuentran la experiencia preocupante.
Algunos de los posibles efectos secundarios graves son presión arterial baja, mareos y desmayo, en especial, si el medicamento se mezcla con alcohol.
La Administración de Alimentos y Medicamentos recomienda evitar el uso de alcohol si se toma este fármaco.
Los expertos recomiendan suspender el medicamento si no se observa una mejora en el deseo sexual después de ocho semanas.
Opciones para aumentar el deseo sexual
La mayoría de las mujeres se benefician de un enfoque de tratamiento orientado a las diversas causas detrás de esta afección.
Las recomendaciones comprenden educación sexual, terapia y, a veces, medicamentos y terapia hormonal.
Educación y terapia sexual
Hablar con un terapeuta sexual o con un asesor capacitado en abordar temas sexuales puede ayudar con la disminución del deseo sexual.
La terapia suele consistir en información sobre la respuesta sexual y técnicas sexuales. Es probable que el terapeuta o asesor te recomienden material de lectura o ejercicios para hacer en pareja.
El asesoramiento psicológico de pareja que aborda temas de relaciones también puede incrementar sentimientos de intimidad y deseo.
Terapia hormonal
La sequedad o el encogimiento de la vagina, uno de los signos distintivos del síndrome genitourinario de la menopausia, puede hacer que el sexo sea incómodo y, a su vez, reducir el deseo. Ciertos medicamentos hormonales que tienen como objetivo aliviar los síntomas del síndrome genitourinario de la menopausia podrían ayudar a que el sexo sea más cómodo. Y estar más cómoda durante el sexo puede mejorar tu deseo.
Las posibles terapias hormonales
Estrógeno
El estrógeno está disponible en muchas formas, como píldoras, parches, atomizadores y geles.
En las cremas vaginales y en un supositorio o anillo de liberación lenta hay dosis menores de estrógeno.
Tu médico puede ayudarte a comprender los riesgos y beneficios de cada una de estas formas.
Pero el estrógeno no mejorará el funcionamiento sexual relacionado con el trastorno del deseo sexual hipoactivo.
Testosterona
La hormona masculina testosterona desempeña un papel importante en la función sexual femenina, aunque la testosterona se presenta en cantidades mucho más bajas en las mujeres.
La testosterona no está aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) para la disfunción sexual en las mujeres pero, en ocasiones, se receta fuera de lo autorizado para ayudar a elevar una disminución de la libido.
El uso de la testosterona en las mujeres es controvertido. Tomarlo puede causar acné, exceso de vello corporal y cambios en el estado de ánimo o en la personalidad.
Prasterona (Intrarosa)
Este óvulo vaginal suministra la hormona dehidroepiandrosterona directamente a la vagina para ayudar a aliviar el dolor durante las relaciones sexuales.
Este medicamento se usa todas las noches para aliviar los síntomas de la sequedad vaginal moderada a grave relacionada con el síndrome genitourinario en la menopausia.
Ospemifeno (Osphena)
Si se la toma a diario, esta píldora puede ayudar a aliviar los síntomas sexuales dolorosos en mujeres con síndrome genitourinario en la menopausia de moderado a grave.
Este medicamento no está aprobado para su uso en mujeres que tuvieron cáncer mamario o que tienen un alto riesgo de presentar cáncer mamario.
Remedios caseros
Incluso los pequeños cambios saludables en el estilo de vida pueden hacer una gran diferencia en tu deseo sexual:
- Haz ejercicio: El ejercicio aeróbico regular y el fortalecimiento muscular pueden aumentar la fortaleza, mejorar tu imagen física, mejorar tu estado de ánimo y elevar la libido.
- Reduce el estrés:Encontrar métodos efectivos para encarar el estrés laboral, diario y financiero puede mejorar el deseo sexual.
- Comunícate con tu pareja: Las parejas que aprenden a comunicarse en forma abierta y honesta mantienen, por lo general, una conexión emocional más fuerte que puede ayudar a mejorar el sexo.
En materia de sexo, la comunicación es importante. Conversar acerca de lo que te gusta o lo que te disgusta puede ayudar a crear una intimidad sexual mayor.
- Reserva tiempo para la intimidad: Programar los encuentros sexuales en el calendario puede parecer aburrido y artificial. Pero dar prioridad a la intimidad puede ayudarte a restablecer el deseo sexual.