De acuerdo con los expertos en sociología y analistas en temas de migración, Estados Unidos será en un futuro próximo un país de minorías.
Se estima que para el año 2060 los blancos no hispanos serán menos de la mitad de la población.
Esto sin duda alguna se convierte en la pesadilla de candidatos como Donald Trump y podría ser el caballito de la victoria si Joe Biden se lo propone.
Sin embargo, eso no será fácil para el candidato Demócrata que busca su reelección al igual que el controvertido Republicano.
Lo anterior, debido a que muchos hispanos, marcados desde su origen por férreos valores conservadores y más preocupados hoy por su bolsillo que por la frontera, están dispuestos a votar por el magnate que por el actual mandatario.
La figura populista y xenófoba de Trump se ha normalizado en gran parte del país, y los latinos no son una excepción.
Las encuestas hablan
Varias encuestas recientes sugieren que el voto hispano y latino se está inclinando hacia Donald Trump a medida que se acercan las elecciones.
En una encuesta de YouGov del 8 de mayo pasado, el 43% de los estadounidenses dijeron que votarían por el presidente Joe Biden y el 43% votaría por Trump si las elecciones se celebraran ahora.
Las elecciones para el próximo presidente de EE.UU. están actualmente muy reñidas, y otras encuestas predicen resultados similares.
Dada la reñida carrera, el voto latino y el voto hispano podrían ser extremadamente importantes, particularmente en estados que regularmente oscilan entre demócratas y republicanos en las elecciones presidenciales.
Lo que dicen los números
Una mirada a la relación entre el origen étnico y las intenciones de voto en la encuesta de YouGov muestra que alrededor del 38% de los blancos dicen que votarán por Biden y el 49% por Trump.
En el caso de los hispanos, las cifras son 45% para Biden y 39% para Trump.
Sin embargo, cualquier movimiento hacia Trump entre estos grupos es particularmente interesante porque su número está aumentando en Estados Unidos con el tiempo y porque los hispanos históricamente se han girado a los demócratas.
Según el Pew Research Center, en 2021 había 62,5 millones de latinos viviendo en Estados Unidos, alrededor del 19% de la población total.
La población hispana en EE.UU. creció de 35 millones en 2000 a 42 millones en 2021.
¿Qué explica este cambio?
Parece que hay un sesgo anti-gobernante en la política estadounidense que está vinculado a la agitación causada por la pandemia, la crisis del costo de vida y las guerras culturales.
Esto ha estado sucediendo durante algún tiempo y perjudicó a Donald Trump en las elecciones de 2020 y ahora está afectando el apoyo de Joe Biden entre los votantes de minorías étnicas.
Los cambios en el voto hispano también pueden surgir de sus actitudes hacia el desempeño del candidato y los temas.
Una forma de ver esto es examinar las percepciones de los votantes sobre el desempeño de Trump en su cargo en 2020 en comparación con el desempeño de Biden en 2024.
Los latinos tienen el poder de definir
Según el estudio electoral de 2020, el 52% de los blancos aprobó el desempeño laboral de Trump y el 48% lo desaprobó.
En el caso de los hispanos, las valoraciones fueron muy diferentes, con un 28% aprobando y un 72% desaprobando.
La brecha de aprobación (aprobación menos desaprobación) fue de más 4% para los blancos y menos 44% para los hispanos.
Cuatro años después, la encuesta de YouGov muestra que la brecha de aprobación para Biden en el caso de los blancos era de menos 28% y para los latinos de menos 20%.
La sustitución de Biden por Trump ha cambiado actitudes en ambos grupos étnicos, pero las diferencias en las brechas de aprobación se han reducido.
Los ahora tienen el “balón” de su lado
Los hispanos son suficientes para inclinar la balanza hacia cualquiera de los lados.
Según Clarissa Martínez, vicepresidenta de la organización UnidosUS los latinos, “van a ser determinantes, pero ningún partido debe dar por sentado su apoyo”.
Los latinos con derecho a voto, ya la primera minoría del país por delante de los afroamericanos, han crecido un 12% desde las presidenciales de 2020 hasta los 36 millones, cuatro más que hace cuatro años.
Son el segundo grupo étnico que más ha aumentado, solo superado por los asiáticos (15%), quienes suman dos millones de votantes este año y se colocan en 15 millones de electores.
Jiromi Peña y Aleida Cura son dos de esos nuevos votantes, con su recién estrenada mayoría de edad, aunque políticamente se sitúan en las antípodas.
El sentimiento antitrump de Peña nació cuando tenía 10 años y todas las cadenas de televisión anunciaban al mundo el triunfo del republicano.
Mientras que Cura, señala que no le da ningún miedo y considera que hay una especie de presunción demócrata sobre todos los hispanos que no responde a la realidad.
- Imagen de portada tomada/Saul Loeb, Timothy A. Clary – Agencia AFP