Petro quiere que la Estatua de la Libertad sea deportada a Colombia como crítica a Estados Unidos
En un discurso reciente, Gustavo Petro lanzó una idea polémica: mover la Estatua de la Libertad desde Nueva York hasta Cartagena. Según él, ese símbolo perdió valor en un país que no respeta los derechos de los migrantes. Por eso, Petro quiere que la Estatua de la Libertad sea deportada a Colombia y colocada en un lugar que represente una lucha verdadera por la libertad.
El presidente recordó la historia de San Basilio de Palenque, un pueblo fundado por afrodescendientes que lograron su independencia sin esperar favores. Afirmó que esa historia refleja la libertad de forma más genuina que cualquier estatua en Estados Unidos.
Gustavo Petro denuncia abusos en los centros de detención migratoria
Durante su intervención, Petro señaló que Estados Unidos encarcela y deporta migrantes en condiciones inhumanas. Afirmó que algunos viajan encadenados y mencionó el caso de una colombiana que murió durante su expulsión. Esta denuncia reforzó su mensaje: Petro quiere que la Estatua de la Libertad sea deportada a Colombia porque ya no representa lo que promete.
Además, criticó los centros de detención en Florida, a los que llamó “Alligator Alcatraz”. Dijo que allí se repite una historia de discriminación y violencia contra los más vulnerables.
Cartagena aparece como destino simbólico para la estatua
Petro eligió Cartagena por su conexión con la historia afrocolombiana. San Basilio de Palenque está cerca de la ciudad y se reconoce como el primer territorio libre de América. Para el mandatario, trasladar la estatua allí sería un acto de justicia histórica. También serviría para dar visibilidad a una lucha que comenzó hace siglos y sigue vigente.
De este modo, al decir que Petro quiere que la Estatua de la Libertad sea deportada a Colombia, el presidente propone una nueva narrativa sobre lo que significa ser libre en América.
La propuesta generó reacciones en redes y medios internacionales
La propuesta no llegó como un plan formal, pero sí captó la atención. Usuarios en redes sociales reaccionaron con memes, burlas y debates. Algunos periodistas calificaron la declaración como populista. Otros la consideraron un gesto político con fuerza simbólica. En cualquier caso, la frase Petro quiere que la Estatua de la Libertad sea deportada a Colombia se volvió tendencia en pocas horas.
Hasta ahora, el gobierno estadounidense no respondió. Sin embargo, la frase ya dejó huella en la conversación pública de ambos países.
La Estatua de la Libertad ya no representa lo que solía
Este monumento llegó a Estados Unidos en 1886 como un regalo de Francia. Desde entonces, se convirtió en un ícono de bienvenida y esperanza. Para millones de inmigrantes, fue el primer símbolo de una vida nueva. Sin embargo, Petro cree que ese mensaje ya no es real. Las deportaciones, el racismo estructural y las políticas de encierro dañan ese legado.
Así, cuando Petro dice que la Estatua de la Libertad debe ser deportada a Colombia, no solo lanza una crítica. También sugiere que América Latina puede ser un nuevo faro de libertad y dignidad.