Un hombre vio su vida trastocada en pocos días tras sufrir un pequeño corte mientras inflaba un viejo colchón de aire en su sótano.
Georg Winterling, de Alemania, recibió una pequeña herida en el dedo índice en el proceso.
Pero aunque la mayoría de nosotros no le daríamos mucha importancia, su corte luego se infectó y se convirtió en una ampolla, y al principio, preocupado por la lesión, fue a que lo revisaran.
Dos médicos le dijeron al hombre de 40 años que su infección no parecía ser demasiado grave, sin embargo, en pocos días, las cosas empezaron a empeorar.
A los pocos días, ya no podía respirar y fue ingresado en el hospital, donde los médicos descubrieron que sufría sepsis.
Qué le ocurrió
Según Mayo Clinic, la sepsis es una afección en la que el cuerpo responde de forma inadecuada a una infección, que en el caso de Georg fue causada por excrementos de ratón en el colchón, lo que hace que los procesos que combaten las infecciones se vuelvan contra el cuerpo, causando que los órganos funcionen mal.
Luego puede progresar a un shock séptico, donde la presión arterial cae lo suficiente como para dañar órganos como los pulmones y los riñones, que es lo que le sucedió a Georg.
Al darse cuenta de la gravedad de la situación, los médicos pusieron a Winterling en un coma inducido, donde el oxígeno de su cuerpo permaneció principalmente en sus órganos vitales.
Sin embargo, esto dejó sus brazos y piernas sin suficiente oxígeno, lo que llevó a los médicos a tener que amputarlos.
Hablando de su vida después de la amputación, dijo: “No tenía ni idea de qué era la sepsis y qué podía provocar al final«.
Georg, contó que: “Recientemente me enteré de lo grave que puede ser la sepsis. En la mayoría de los casos, provoca la muerte porque no se la reconoce adecuadamente. En ese sentido, tuve mucha suerte de haber sobrevivido y de seguir aquí sentado hoy”.
Fase de recuperación
Después de la operación, Georg se sometió a terapia para aprender a caminar con sus nuevas piernas protésicas y ahora depende en gran medida de su esposa y sus hijos para que lo ayuden en su vida diaria.
Sin embargo, aunque está haciendo buenos progresos e incluso ha vuelto a su antiguo pasatiempo, el esquí, está ansioso por que las cosas avancen más rápido.
Georg le dijo a DW: «Las cosas seguirán progresando. Si un enfoque no funciona, siempre habrá otro«.
«Y encontrar ese nuevo enfoque se convierte en lo más importante que hay que hacer».
Razones para una amputación
Existen muchas razones por las que puede ser necesaria una amputación.
La más común es la mala circulación debido a daño o estrechamiento de las arterias, llamada enfermedad arterial periférica.
Sin un flujo sanguíneo adecuado, las células del cuerpo no pueden obtener el oxígeno y los nutrientes que necesitan del torrente sanguíneo.
Como resultado, el tejido afectado comienza a morir y puede aparecer una infección.
Otras causas de amputación pueden incluir:
- Lesión grave (por ejemplo, por un accidente de tráfico o una quemadura grave)
- Tumor canceroso en el hueso o músculo de la extremidad.
- Infección grave que no mejora con antibióticos u otros tratamientos.
- Engrosamiento del tejido nervioso, llamado neuroma.
- Congelación.
El procedimiento de amputación
Una amputación suele requerir una hospitalización de cinco a catorce días o más, según la cirugía y las complicaciones.
El procedimiento en sí puede variar según la extremidad que se amputa y la salud general del paciente.
La amputación se puede realizar bajo anestesia general (lo que significa que el paciente está dormido) o con anestesia raquídea, que adormece el cuerpo desde la cintura para abajo.
Al realizar una amputación, el cirujano elimina todo el tejido dañado dejando la mayor cantidad posible de tejido sano.
El médico puede utilizar varios métodos para determinar dónde cortar y cuánto tejido extraer. Entre ellos se incluyen los siguientes:
- Comprobación del pulso cerca del lugar donde el cirujano planea cortar
- Comparación de las temperaturas de la piel de la extremidad afectada con las de una extremidad sana
- Buscando áreas de piel enrojecida
- Verificar si la piel cerca del sitio donde el cirujano planea cortar aún está sensible al tacto.
Recuperación de una amputación
La recuperación de una amputación depende del tipo de procedimiento y de la anestesia utilizada.
En el hospital, el personal cambia los apósitos de la herida o le enseña al paciente a cambiarlos.
El médico controla la cicatrización de la herida y cualquier afección que pueda interferir con la cicatrización, como la diabetes o el endurecimiento de las arterias.
El médico prescribe medicamentos para aliviar el dolor y ayudar a prevenir la infección.
Si el paciente tiene problemas de dolor fantasma (una sensación de dolor en el miembro amputado) o pena por el miembro perdido, el médico le recetará medicamentos y/o asesoramiento, según sea necesario.