En Octubre pasado, varios departamentos de la Policía de Canadá asistieron a un encuentro de Integración Tecnológica y Operaciones del Centro de Delitos en Tiempo Real en Mississauga, Ontario, a principios de octubre, según se enteró CBC Hamilton.
Algunos de los asistentes vieron una demostración de Fusus, un servicio pago que facilita a la policía el acceso a imágenes de cámaras de seguridad privadas de residentes y empresas si así lo requieren.
Según la información divulgada en esa conferencia, se ha vuelto cada vez más normal en los Estados Unidos, porque según las autoridades ha facilitado la tarea de la Policía.
Para algunos expertos les preocupa que la vigilancia pueda excederse y los comisionados de privacidad dicen que quieren ser consultados si los agentes usan Fusus, dado que permitiría a la policía vigilar a los ciudadanos sin una orden judicial.
Natasha Tusikov, exanalista del Servicio de Inteligencia Criminal de Canadá e investigadora de la RCMP, recalcó que este es el momento adecuado para que la sociedad canadiense hable y dicte sobre este tema tan relevante sobre la seguridad ciudadana.
Así funciona
Lo que hemos podido conocer en este medio de comunicación es que Fusus se pone en contacto con personas para preguntarles si quieren registrar sus cámaras.
Los habitantes de las viviendas tendrían la opción de permitir que la Policía tengan acceso en tiempo real a sus cámaras o informar que pueden acceder a los videos.
Lo que se ha conocido es que la Policía tendría accesos a unas 16.000 cámaras integradas. Asimismo, 18.500 cámaras de propiedad de personas dispuestas a compartir vídeos según se lee en una nota de CBC News.
Así las cosas, los oficiales responderán a las llamadas 911 obtener más detalles mientras se dirigen a la escena y simplifica la investigación de delitos después del hecho.
Los agentes sobre el terreno también pueden mirar las cámaras en tiempo real desde sus vehículos mientras están patrullando.
Estos equipos ahorran tiempo para llamadas de menor prioridad, como delitos contra la propiedad, y facilitan que la policía proporcione videos a los abogados que solicitan imágenes de accidentes automovilísticos como los hechos delictivos ocurridos dentro de una vivienda.
Podría ser algo problemático
Para Natasha Tusikov, exanalista del Servicio de Inteligencia Criminal de Canadá dijo que, si bien la policía puede decir que Fusus es de gran ayuda, ella cree que la tecnología es “problemática”.
Esta herramienta tan polémica, que además cuentan con reconocimiento facial, lo que permite identificar rápidamente a las personas siempre que lo necesiten en diferentes hechos delictivos.
Señala Clearview AI, una controvertida herramienta de reconocimiento facial que los servicios policiales canadienses utilizaron en secreto hasta que los organismos de control de la privacidad les ordenaron que dejaran de hacerlo.
Tusikov dijo que Fusus sería una “respuesta desproporcionada” a delitos como el robo de automóviles, que ha aumentado en Canadá, y probablemente no ayudaría con la violencia de pareja, que ha sido declarada epidemia en Hamilton y otras ciudades del país.
Para la experta, es preocupante que algunas personas en el vecindario integren su cámara, “otras puedan sentirse presionadas a hacer lo mismo”.
Se debe consultar
Vito Pilieci, asesor principal de comunicaciones de la Oficina del Comisionado de Privacidad de Canadá, dijo en un correo electrónico que la RCMP no se ha comunicado con la oficina sobre Fusus.
Agregó que esperaría que consultaran con anticipación y realizaran una evaluación del impacto de la privacidad para saber si aplican o no este sistema.
Dice la representante del Gobierno Federal que este tipo tecnología “debería estar plenamente justificado por una necesidad apremiante y legítima y tendría que ser proporcional para no excederse en la medida”.
La Oficina del Comisionado de Información y Privacidad de Ontario dijo en un correo electrónico que no tiene conocimiento de ningún servicio policial que utilice Fusus en la provincia hasta la fecha y que tendrían que consultarle a la comunidad si creen que es necesario.
También precisaron que los servicios policiales deberían consultar con ellos y realizar una evaluación del impacto en la privacidad antes de utilizar la tecnología.