William Eduardo Santander De La Hoz, un publicista colombiano de 32 años, desapareció trágicamente en el río San Lorenzo en Montreal, Canadá, el pasado sábado 6 de julio de 2024. Originario de Salamina, Magdalena, William era conocido por su carácter amable y su pasión por la publicidad. Su desaparición ha dejado a familiares y amigos sumidos en la incertidumbre y la angustia.
El Incidente
El fatídico día, William se encontraba celebrando el cumpleaños de un amigo a bordo de un yate en Montreal. Según testigos, mientras intentaba ayudar a una amiga a mantener el equilibrio en la parte trasera del yate, William perdió el suyo y cayó al río. A pesar de los esfuerzos inmediatos por rescatarlo, desapareció rápidamente debido a las fuertes corrientes del río San Lorenzo. Justo antes de la tragedia, William había subido un video a sus redes sociales mostrando la celebración y el buen ambiente que se vivía en el bote.
Reacción y Búsqueda
La noticia de su desaparición conmocionó tanto a la comunidad latina en Canadá como a sus familiares en Colombia. Su madre, María De La Hoz, viajó inmediatamente a Montreal con la esperanza de encontrar a su hijo. «William es un buen hijo, trabajador y siempre dispuesto a ayudar a los demás. No podemos perder la esperanza de encontrarlo», declaró María.
Las autoridades canadienses, junto con voluntarios, desplegaron equipos de rescate, incluyendo buzos y helicópteros, para rastrear el río. Sin embargo, las fuertes corrientes y la profundidad del río complicaron la operación. Tras varios días de búsqueda infructuosa, la familia de William hizo un llamado a la comunidad para intensificar los esfuerzos de búsqueda, organizando vigilias y recolectando fondos para apoyar la misión.
Impacto en la Comunidad
La desaparición de William resonó profundamente entre los colombianos residentes en Canadá, quienes se movilizaron rápidamente para apoyar a la familia. En Montreal, se realizaron varias manifestaciones para pedir una mayor respuesta de las autoridades locales. Manuel Pérez, un amigo cercano de William, comentó: “William era como un hermano para mí. Siempre estuvo ahí en los momentos difíciles y ahora es nuestro turno de estar para él y su familia. No descansaremos hasta encontrarlo” .
La trágica desaparición de William Santander es un doloroso recordatorio de los riesgos que pueden surgir en momentos de celebración. Mientras la búsqueda continúa, sus familiares y amigos mantienen viva la esperanza de encontrarlo, con el apoyo incondicional de la comunidad colombiana y latina en Canadá. La historia de William no solo destaca la necesidad de medidas de seguridad más estrictas en actividades recreativas, sino también la fortaleza y la unión de una comunidad en tiempos de crisis.