!Confirmado¡ Acaba de renunciar el que fuera el primer ministro de federal de Canadá Justin Trudeau.
Lo anterior, se da tras varias semanas de fuertes rumores en Ottawa de la salida del premier canadiense.
Esto tras una crisis de liderazgo que ha provocado que el premier pierda apoyo dentro de su propio partido.
Trudeau abandona el liderazgo del Partido Liberal, pero permanecerá como primer ministro hasta que su grupo designe a un nuevo líder.
Cómo llegamos a este escenario
La popularidad de Trudeau ha disminuido en los últimos meses; su gobierno ha sobrevivido a una serie de votos de censura y a críticas que pedían su dimisión.
Se había comprometido a quedarse para guiar a los liberales a las elecciones, pero se ha enfrentado a una mayor presión del presidente entrante de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha amenazado con aplicar un arancel del 25% a los productos canadienses.
Otra situación que agudizó la crisis fue la salida de la viceprimera ministra Chrystia Freeland quein renunció en diciembre pasado, después de estar en desacuerdo con Trudeau sobre cómo responder al aparente plan de Trump.
En una publicación en X, Freeland dijo que se iba después de que Trudeau le pidiera que renunciara como ministra de Finanzas.
Esto citó desacuerdos con el primer ministro, incluida la forma de manejar la amenaza arancelaria de Trump y el «nacionalismo económico de Estados Unidos primero«.
Desde entonces, un número cada vez mayor de parlamentarios liberales, alarmados por una serie de encuestas sombrías, han instaron públicamente a Trudeau a que renunciara.
Cómo queda el partido de Trudeau
En cuanto a los liberales, la salida de Trudeau deja al partido sin un jefe permanente en un momento en que las encuestas sugieren que perderán por mucho frente a los conservadores de la oposición en una elección que debe celebrarse a fines de octubre.
Los liberales tendrán que organizar una convención de liderazgo especial para elegir a su próximo jefe.
El desafío para el partido es que estas convenciones suelen tardar meses en organizarse y, si antes se celebran elecciones, los liberales quedarían en manos de un primer ministro no elegido por los miembros.
Esto nunca ha sucedido en Canadá. Los liberales podrían intentar realizar una convención más breve de lo habitual, pero esto podría provocar protestas de candidatos que sienten que esto los pone en desventaja.
Los posibles candidatos a reemplazar a Trudea
Estos son algunos de los políticos ampliamente considerados como potenciales contendientes para el máximo cargo del Partido Liberal.
Mark Carney: Economista y banquero que se desempeñó como ex gobernador del Banco de Canadá y ha estado asesorando al gobierno liberal en asuntos económicos.
Francois-Philippe Champagne: Ministro de Innovación, Ciencia e Industria desde 2021, anteriormente fue ministro de Asuntos Exteriores.
Chrystia Freeland: es diputada por University-Rosedale, Ontario, y ex viceprimera ministra. Recientemente se ha mostrado abiertamente crítica de Trudeau y se la considera una alternativa creíble y estable a su liderazgo. En las encuestas, es la que tiene mejor desempeño entre los políticos liberales antes de las elecciones.
Melanie Joly: La actual ministra de Asuntos Exteriores, Joly, ha tenido un papel destacado en el escenario internacional y será la encargada de ocuparse de los asuntos relacionados con Trump cuando asuma el cargo. Ha sido una firme defensora de Trudeau.
Dominic LeBlanc: considerado un aliado cercano de Trudeau, fue nombrado ministro de Finanzas después de la partida de Freeland.
Pierre Poilievre, el más opcionado
Se espera ampliamente que él sea el hombre que se convierta en primer ministro después de las próximas elecciones de Canadá.
En los últimos días, Trudeau se encuentra 20 puntos por detrás del líder del Partido Conservador en las encuestas de opinión pública.
Poilievre no es conocido por andarse con rodeos. Ha llamado a la alcaldesa de Montreal, Valerie Plante, “incompetente”, al líder del Nuevo Partido Democrático, Jagmeet Singh, “vendido”, y a Trudeau “débil” y “chiflado”.
Este último insulto le valió la expulsión temporal de la Cámara de los Comunes en abril por “lenguaje antiparlamentario”.
Los debates en el Parlamento canadiense suelen ser serios, pero últimamente se han vuelto más tensos y animados.
Al igual que Trump, Poilievre también es fanático de las frases cortas y pegadizas para resumir sus mensajes políticos: “Axe the tax” en referencia a un impuesto federal al carbono, o “Justinflation”, una palabra compuesta para culpar al primer ministro por la inflación.
Al igual que Trump, también le gusta describirse como una víctima del maltrato de las élites y los medios tradicionales.
También tiene poco apoyo entre las mujeres, otra similitud con Trump.
- Imagen tomada/La Presse canadienne-Sean Kilpatrick