Los que parecían una pareja cualquier, terminaron siendo la más tenebrosa de un vecindario.
Esto en medio de una lejana ciudad en Rusia en la que escondía un macabro secreto.
Se trata de Dmitry y Natalia Bakshéyev que durante varios años se alimentaron de carne humana.
Esta pareja sentimental, también se dedicaban a venderla a restaurantes reconocidos en su país.
De acuerdo con el informe de la Policía rusa, sus homicidios fueron hechos con mucha sutiliza y que quedaron al descubierto gracias a los datos encontrados en un celular que compartía la pareja sentimental.
La mujer que hace parte de esta horrible historia hizo parte de Colegio Superior Militar de Aviación de Krasnodar, como enfermera en el que fue despedida por sus excesos con el alcohol.
Mientras que Dmitry era un delincuente que le había hecho el quite a la Justicia por varios delitos menores de hurto y se dedicaba a los oficios varios.
Esta pareja vivió en un dormitorio durante varios años y según los vecinos la gran parte del tiempo, ellos no daban pista de actitudes extrañas.
La historia
Los dos estaban desempleados y en medio de su difícil situación económica, empezaron a ofrecer pasteles de carne a sus vecinos más cercanos y del barrio y en algunos momentos era preguntada por sus clientes sobre con qué hacía este plato que le quedaba “tan rico”.
En ese orden y al pasar del tiempo, la pareja de caníbales llegó a distribuir carne en el complejo militar que trabajó la femenina y posteriormente a reconocidos restaurantes en los que nunca pensaron llegar en medio de su locura.
Natalia mintió en los requisitos que le exigían para poder servir la carne humana y se las arreglaba para entregar las certificaciones y así entrar en el negocio como proveedora oficial de carne.
Así los atraparon
En medio de sus reparticiones como supuesta carnicera, logró convencer a una mujer identificada como Elena Vashrushev, que era camarera, para que trabajara con ellos y a la que le prometió un gran sueldo que nunca llegó por supuesto.
Cuando estaba Elena estaba en la casa con la pareja de caníbales, esta fue asesinada, pero sin que Natalia se percatara a tiempo, ella dejó caer su celular en la calle y fue ahí donde un obrero lo encontró y se asustó mucho cuando vio las fotos que este móvil contenía.
El sujeto fue a la Policía y denunció los hechos que empezaron a investigar de inmediato porque Elena ya tenía varios días como desaparecida y había sido denunciada, por lo que de inmediato empezó la búsqueda de los presuntos asesinos de la de la camarera y de la misma occisa que a ese instante aún no se sabía sobre su paradero.
Pero bastó llegar a la vivienda, para que se dieran cuenta de que la mujer desaparecida había sido asesinada de varias puñaladas y que iba a ser descuartizada como muchas otras.
Tanto Natalia como Dmitry habrían incurrido en el crimen contra esta inocente mujer que fue engañada y que estuvo a punto de terminar como comida en un restaurante fino.
La casa del horror
Lo que sabemos, es que la Policía en medio de un vasto operativo para la búsqueda de Elena, se topó con la sorpresa de partes humanas de muchas personas que fueron descuartizadas.
Según medios locales rusos, en la cocina las partes estaban divididas en bandejas de carne y encontraron 22 fragmentos de cuerpo humano que más tarden supieron que eran de unas 15 personas reportadas como desaparecidas anteriormente.
La hoy encarcelada pareja condenada a cadena perpetua en Rusia confesó sin temor alguno y sin sonrojarse que tenían unas partes de cuerpos a la venta y otras para ellos comer cada vez que quisieran.
Esta pareja paga cárcel en estos momentos y los vecinos le ruegan a la Justicia de que no les den ningún beneficio al respecto y que “paguen por todo el daño que causaron a las familias de los asesinados y al país”.

