El gobernador de Florida (EE. UU.) Ron DeSantis, lanzó un paquete de iniciativas destinadas a tomar “medidas enérgicas” contra los inmigrantes indocumentados.
Esto incluye la ampliación de un sistema administrativo que deberán usar los empleadores.
El gobernador, criticó las políticas migratorias del presidente Biden, a quien responsabilizó de la “afluencia de drogas y otros problemas” en la frontera sur.
La propuesta legislativa quiere “evitar el acceso de los inmigrantes a la atención médica, la educación y criminalizar a cualquiera que refugio a uno.
Una decena de organizaciones proinmigrantes reaccionaron de inmediato ante el anuncio de DeSantis rechazando estas medidas.
Para la coalición en favor de los inmigrantes, DeSantis “está liderando el camino para hacer retroceder el reloj en materia de derechos humanos”.
Entre otras medidas para “desincentivar la inmigración ilegal”, se obligará a los hospitales a recopilar datos sobre el estatus migratorio de pacientes y presentar periódicamente.
Señalan que es una agenda que infunda el “odio”
Tessa Petit, directora ejecutiva de FLIC, dijo que esto no es solo un problema de inmigrantes: Se trata de un tema de “moralidad y de libertad”.
Agrega que “en ese contexto, los funcionarios electos que respaldan las propuestas del gobernador son cómplices de una agenda llena de odio que conducirá al miedo y a una Florida debilitada”.
Pero Desantis afirma que, con esta legislación, Florida “continúa tomando medidas enérgicas contra los municipios que emitan tarjetas de identificación a las personas que están ilegalmente”.
Actualmente, la ley de Florida requiere que todos los empleadores públicos usen E-Verify, un sistema administrado por el Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU.
Las dos cámaras del Congreso de Florida tienen mayoría republicana, por lo que se prevé que muchas de las iniciativas del gobernador salgan adelante.
Una ley auspiciada por DeSantis permite el traslado de inmigrantes que no necesariamente estén en Florida a otras partes del país.
Arrestos a migrantes
Los arrestos de migrantes que cruzan de forma irregular la frontera sur de Estados Unidos cayeron un 96% en los dos primeros meses de 2023.
Aun así, las detenciones de colombianos siguen en aumento.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional, enero y febrero de este año se registraron los niveles más bajos de arrestos desde 2021.
Las detenciones de cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos pasaron de un promedio de 1.231 a comienzos de enero a 46 a finales de febrero.
Según la administración Biden, parte de esta reducción se debe a las restricciones a las solicitudes de asilo recientemente implementadas.
A pesar de este informe, las cifras de colombianos detenidos en la frontera sur de Estados Unidos continúan aumentando.
En febrero se registraron 13.319 arrestos de connacionales que cruzaron irregularmente la frontera. Esto es casi 3.500 más de lo registrado en enero.
Actualmente Colombia es el cuarto país emisor de indocumentados hacia Estados Unidos, esto según el reciente registro de la Patrulla Fronteriza que comprende el mes de febrero de 2023.
Amigables con los migrantes
Estados Unidos es el país del mundo con el mayor número de inmigrantes: se calcula que actualmente viven allí más de 45 millones de personas que nacieron en otro país.
Mientras que un 23% de esas personas se encuentra en una situación irregular —entre 10 y 11 millones de personas—, el 77% restante posee algún tipo de estatus legal.
Lo anterior, ya sea porque se naturalizaron ciudadanos, porque obtuvieron la residencia permanente o porque obtuvieron la residencia temporal, según indica el Pew Reaserch Center.
Las condiciones de vida en EE.UU. de esas personas se encuentran profundamente marcadas por ese estatus legal, sobre todo después de las leyes federales de bienestar e inmigración del año 1996, que inauguraron una era de restricciones para los inmigrantes.
En ese contexto, muchos estados han trabajado para suplir ciertas falencias federales, con políticas inclusivas para que las personas con un estatus migratorio irregular puedan acceder a los programas, beneficios y servicios públicos.
Tanya Broder, del Centro Nacional de Leyes de Inmigración, dijo a CNN que «más de un tercio de los estados adoptaron al menos una ley o política inclusiva de inmigrantes en 2022.
Los gobiernos estatales y locales reconocen cada vez más la necesidad de garantizar que todos los residentes tengan acceso a atención médica, apoyo económico y seguridad laboral”.
Ciudades santuario
«Ciudad santuario» es un término amplio para las jurisdicciones territoriales que tienen políticas diseñadas para limitar la cooperación o la participación en las acciones federales de aplicación de la ley de inmigración.
La mayoría de esas políticas consisten en no cooperar con la aplicación de la ley federal en las políticas inmigratorias.
A veces, esas medidas impiden a las agencias cumplir con las órdenes de detención del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).
Estas urbes bloquean la posibilidad de entrevistas a los indocumentados o impiden cruzar información sobre esas personas entre agencias de distintos niveles.
Los estados que son considerados ciudades santuario son California, Colorado, Connecticut, Illinois, Massachusetts, Nueva Jersey, Nuevo Mexico, Nueva York, Oregon, Vermont, Washington.
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