España es uno de los países más atractivos para emigrar, la mayoría de los expatriados son provenientes de países latinoamericanos y muchos de ellos han contado como ha sido el proceso de adaptación.
Entre los muchos factores que se destacan en España, se incluyen la aceptación de migrantes y el sentido democrático. Los expatriados valoran la alta calidad de vida, la seguridad, las ofertas laborales y por supuesto, su buen clima, el país europeo brinda a sus habitantes un equilibrio entre la vida laboral y personal, la facilidad para establecerse y la acogida de comunidades.
España es el hogar de algunos de los lugares más hermosos de Europa y aunque existe el riesgo de sufrir un choque cultural, algunas personas nunca logran adaptarse, hay un gran número de personas que logran adaptar sus vidas al acelerado ritmo de las ciudades más cosmopolitas del continente europeo.
¿Sabías que, además del castellano o español, ¿tienen otros idiomas oficiales como el catalán o el euskera?, España es un destino que todos deberían visitar al menos una vez en la vida, tiene de todo y para todos, significa gozar de una buena calidad de vida, de un excelente sistema educativo y de las amplias ofertas gastronómicas.
España es uno de los países más atractivos para los emigrantes latinoamericanos porque están en buscan de nuevas oportunidades, puesto que, al compartir el mismo idioma y rasgos culturales similares, y sumado al deseo de alcanzar una mejor calidad de vida, han convertido la nación española en el segundo destino más visitado por este grupo demográfico, sólo por detrás de los Estados Unidos.
En España, las oportunidades para estudiar y trabajar le distinguen de otros países del continente europeo, además de ser un país seguro, los migrantes encuentran oportunidades laborales que les permite rápidamente mejorar su calidad de vida.
Dejar el país de origen no es una decisión fácil, la gran mayoría que lo hacen es por cuestiones económicas, ven en España la oportunidad de prosperar y no es para menos, ha sido elegido como uno de los 10 países más ricos del mundo, su economía se ha solidificado gracias a la mano de obra de los migrantes.
Hay un lema que sorprende a los expatriados, y es: “En España la gente trabaja para vivir, no vive para trabajar”, a diferencia de los países de la región latinoamericana, los extranjeros logran alcanzar un gran equilibro entre la vida laboral y personal.
Los expatriados valoran la seguridad, el buen clima y la calidad de vida, según datos, el 48% de los expatriados que se trasladan a España se sienten físicamente más sanos después de su traslado, y el 58% afirma haber mejorado su bienestar mental, todo ello muy por encima de la media mundial (33% y 35% respectivamente).
Precisamente, uno de los grandes pilares sobre los que se sustenta este bienestar es la dieta mediterránea, que en 2010 fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Las personas que se trasladan a este país buscan integrarse en la cultura del lugar al que se mudan y el 65% afirma que su nivel de vida ha mejorado.