Con la llegada del covid-19 las citas para la solicitud de visas estadounidenses se convirtieron en un completo caos, a tal punto que las fechas para la presentación en las embajadas se programaron en varios países hasta para dos años posteriores a la fecha de solicitud.
En este contexto, el secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, habló sobre la alta demanda de pasaportes que se está presentando en el país. Al parecer, además de las múltiples denuncias que se han evidenciado a través de los últimos años por parte de extranjeros que piden una visa para esta nación, dentro del territorio nacional la situación no sería diferente.
El alto funcionario habló sobre las demoras en los procesos de visado, que ha traído un sinnúmero de críticas, afectaciones, denuncias, entre otros, por parte de ciudadanos a nivel mundial que expresan la pérdida de tiempo y dinero en las embajadas estadounidenses.
Según indicó Blinken, en cuanto a visados, la Cancillería estaría avanzando más aceleradamente, por lo que indicó que los procesos vienen registrando disminución en cuanto a los tiempos de espera y, por el momento, se están priorizando algunas de las categorías existentes.
“Para estudiantes, para trabajadores temporales, para viajeros de negocios, tripulaciones marítimas (…) intentamos asegurarnos de que se atiendan y estamos en niveles prepandémicos o mejores en esas categorías”, afirmó Blinken, según recalca CNN, indicando que estas son las visas que más rápido están emitiendo.
Aumento en el valor de la visa
Otro de los puntos que empieza a preocupar a los solicitantes del documento es el aumento en el valor del visado, por lo que desde finales de mayo quienes busquen viajar a este país tendrán que pagar hasta 100 dólares más.
De acuerdo con lo declarado por el Departamento de Estado de Estados Unidos la cifra ascenderá a 185 dólares desde el 30 de mayo, cuando actualmente se encuentra en 160 dólares.
Según se indicó desde el portal oficial, los aumentos afectarán múltiples procesos de documentación migratoria, además de la visa de turista, una de las más apetecidas; también se afectó a los visitantes por negocios, estudios y de intercambio cultural, es decir, aquellas que entran en la categoría B1-B2 y BCC.
También pagarán más quienes buscan una visa de trabajo temporal que entre en las categorías H, L, O, P, Q y R, que incluye además trámites para transferencias entre compañías, personas con habilidades extraordinarias, intercambio cultural internacional y los trabajadores religiosos. El documento para estas personas pasará de 190 dólares a 205 dólares.
“La tarifa para un comerciante de tratados, inversionista de tratados y solicitantes de tratados en una ocupación especializada (categoría E) aumentará de $ 205 a $ 315” dólares, afirmó en su comunicado el Departamento de Estado, haciendo referencia a un aumento de unos 110 dólares
“El Departamento utiliza una metodología de Costos Basados en Actividades (ABC) para calcular, anualmente, el costo de brindar servicios consulares, incluidos los servicios de visa. Las tarifas para la mayoría de los NIV que no se basan en peticiones se actualizaron por última vez en 2012, y algunas otras tarifas de NIV se actualizaron por última vez en 2014″, argumentó la entidad estadounidense sobre los aumentos de los costos.