España es un país que atrae a muchos migrantes por su clima soleado, su rica cultura, su deliciosa gastronomía y sus diversos paisajes.
Sin embargo, no todas las ciudades de España ofrecen la misma calidad de vida.
Dependiendo de tus preferencias, presupuesto y estilo de vida, es posible que encuentres algunas ciudades más adecuadas para ti.
En este artículo, desde la sala de redacción de este medio de comunicación exploraremos los 10 mejores pueblos de España para vivir con una mejor calidad de vida en función de varios criterios como el coste de vida, el clima, la seguridad, la atención sanitaria, la educación y el entretenimiento.
10 Capileira, Andalucía
Situado en plena Alpujarra y dentro del Parque Nacional de Sierra Nevada, este pequeño pueblo se encuentra a casi 1.500 metros de altitud y ofrece espectaculares vistas del Barranco de Poqueira y de los picos del Cerro Mulhacén y Pichacho Veleta desde sus miradores.
El pueblo destaca por sus tradicionales casas andaluzas encaladas y varios edificios patrimoniales como la iglesia de Nuestra Señora de la Cabeza y la casa museo de Pedro Antonio de Alarcón.
9 Albarracín, Aragón
Este singular lugar, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra a 1.182 metros de altitud.
Las casas típicamente rojizas del casco antiguo de esta localidad forman calles estrechas que con frecuencia desembocan en miradores improvisados desde donde contemplar el paisaje.
El pueblo de Albarracín se ha construido en la ladera de una montaña y sus peculiares casas colgantes miran al río Gualaviar, que rodea casi por completo la localidad.
El paisaje protegido de los Pinares de Rodeno y varias zonas de pinturas rupestres rodean la localidad.
8 Tejeda, Islas Canarias
Este pueblo se encuentra en el interior de uno de los mayores cráteres volcánicos de Canarias. Destaca por sus espectaculares paisajes, entre los que destaca el Roque Nublo, uno de los símbolos de Gran Canaria.
Se trata de un monolito que se creó durante los procesos volcánicos que tuvieron lugar en la isla.
A escasos kilómetros de aquí se encuentra el Roque Bentayga, un monumento natural de mayores dimensiones que antaño fue lugar sagrado para los aborígenes canarios.
Su belleza natural se combina con la estética histórica de sus edificios blancos y tejados tradicionales para hacer de Tejeda uno de los lugares donde se conserva la estética de los pueblos canarios.
7 Liérganes, Cantabria
Esta localidad cuenta con una valiosa arquitectura clasicista de los siglos XVII y XVIII y se encuentra situada a los pies de dos pequeños cerros: Marimón y Cotillamón, conocidos popularmente como “Las Tetas de Liérganes”.
Su casco antiguo, conocido como “El mercadillo”, cuenta con casonas vernáculas, palacios e iglesias. Además, cuenta con un famoso balneario, que aprovecha las aguas del río Miera.
6 Almagro, Castilla-La Mancha
La historia de esta ciudad, cuyo nombre árabe hace alusión a la arcilla roja con la que se construyen algunos de sus edificios, está ligada al teatro.
El Corral de Comedias es el único patio teatral que se ha mantenido intacto y en activo, ofreciendo interesantes visitas teatralizadas, desde principios del siglo XVII.
Merece la pena visitar el Museo Nacional del Teatro y asistir al Festival Internacional de Teatro Clásico, que atrae cada año a cientos de turistas.
También es excepcional la Plaza Mayor, una de las más bonitas de España con sus columnas y vidrieras pintadas de verde.
5 Frías, Castilla y León
Situado sobre un peñón al borde del río Ebro, Frías es el pueblo más pequeño de España. El pueblo está delimitado por el pico Humión, el más alto del Parque Natural de los Montes Obarenes.
Su arquitectura mezcla elementos romanos y medievales, destacando el castillo de los Velasco y la iglesia de San Vicente Mártir. Entre estos edificios se agolpan sus casas colgantes.
4 Chinchón, Comunidad de Madrid
A pesar de estar a tan sólo 50 kilómetros de la capital, Chinchón es uno de los pueblos más pintorescos y con más personalidad de la región.
Su Plaza Mayor, de forma irregular y estilo medieval, junto con su paisaje urbano de intrincadas callejuelas y conjuntos de casas agrupadas sobre colinas, lo convierten en una visita imprescindible.
Entre sus atractivos turísticos más destacados destacan la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, con un lienzo de Goya preside el altar mayor; la Torre del Reloj, el Teatro Lope de Vega, el castillo de los Condes, el monasterio de San Agustín y el convento de las Clarisas.
3 Ujué, Navarra
Visitar este pueblo situado en la sierra de Ujué es como viajar en el tiempo. Sus calles estrechas y laberínticas y sus casas de piedra caliza trasladan al visitante a la época medieval.
En el centro del casco antiguo se encuentra la Iglesia de Santa María, donde se mezclan los estilos románico y gótico.
No muy lejos de allí se encuentra el Castillazo, donde antiguamente se ubicaba la Universidad Carlos II, y donde aún se pueden encontrar restos de antiguas fortificaciones.
2 Peñíscola, Comunidad Valenciana
Esta ciudad medieval, situada en una península rocosa, es una fortaleza en el mar que se encuentra protegida por un orgulloso castillo templario, el Papa Luna.
El casco antiguo está formado por estrechas calles que esconden sorpresas como los “bufadores” (erosiones en la piedra para que parezca que el agua del Mediterráneo escupe), y otros monumentos destacables como la iglesia parroquial y el Portal Fosc.
Peñíscola también cuenta con una parte costera que se puede descubrir visitando sus fantásticas playas, el puerto y el Museo del Mar.
1 Guadalupe, Extremadura
Visitar el impresionante Real Monasterio de Nuestra Señora de Guadalupe es una de las paradas obligadas en España.
Este monumento, declarado Patrimonio de la Humanidad, ha sido testigo de momentos decisivos en la historia de España, como la audiencia cuando los Reyes Católicos ofrecieron las carabelas a Colón.
Y siempre es un placer dar un paseo por sus calles para contemplar la arquitectura típica serrana en los balcones y soportales. No te pierdas la fuente y la plaza de los tres chorros.